«En marzo, mi hijo se tituló de técnico en laboratorio clínico y banco de sangre. Trabajaba en un laboratorio en Manuel Montt.
Ese día él salió de trabajar y me llamó para avisarme que iba a ir un rato a Plaza Italia. Yo le dije que no fuera, porque me daba miedo. Él me dijo que no me preocupara porque iría un ratito, que iba por mí, porque quería que yo viviera mejor.
Los medios han dicho muchas mentiras. Me molesta que digan que era un saqueador, cuando él venía de trabajar. Es mentira que se cayó del caballo.
El zorrillo no dejó pasar a la ambulancia. Si el zorrillo hubiese dejado pasar a la ambulancia, le hubieran salvado la vida a mi hijo. Ellos tiran bombas a cualquiera. Dispararon contra los médicos que estaban tratando de salvar a mi hijo.
¿Cuántos han matado? ¿Cuántos han torturado? Los medios mienten mucho. La tele miente. Los carabineros mienten. No se les puede llamar carabineros, porque son asesinos. Mataron a mi hijo y me mataron a mí.
Yo sólo quiero que se sepa la verdad. Espero que se haga justicia.
Esto va a seguir, porque lo que están pidiendo los jóvenes y todo el mundo es algo justo. Esto tiene que cambiar. No puede ser que ellos se lleven todo y uno tenga que endeudarse para estudiar, para tener salud.
Quiero que esos asesinos paguen. Me mataron a mi hijo. Pido justicia por mi hijo y por todos los que mataron, por todos los que dejaron ciegos, por todos lo que torturaron. A una niña le pegaron en la vagina y perdió su guagua. ¿Por qué el gobierno permite todo eso?
Hay muchas madres que están sufriendo igual que yo. La mayoría de las víctimas son jóvenes.
Lo único que pido es que digan la verdad».
Video y fotos de Abel Acuña del 8 de noviembre en Plaza Italia: