«Se estima que en torno a un 5% de quienes son diagnosticados con la infección necesitarán ventilación mecánica, por lo que el colapso de las centros asistenciales está directamente relacionado con los haberes de estos equipos», explica el artículo periodístico de Interferencia, que acusa que el sistema de salud chileno no dispondrá de suficientes ventiladores para cuando la cantidad de contagiados alcance las 30.000 personas.
El cálculo del medio incluye la llegada eventual de los 500 ventiladores donados por China y las reconversiones de camas pediátricas y de anestesia utilizadas en la UCI, y asume que el 5% de los pacientes que tienen COVID-19 necesitará cuidados intensivos.
Así también, se establece que el Presidente Sebastián Piñera afirmó que Chile compró estos insumos en enero, cuando realmente fue a mediados de marzo.
El 9 de abril, de acuerdo a lo que informa el portal de noticias, el ministro Jaime Mañalich informó que Chile ya no debe contar con el grueso de las provisiones de las compras de marzo (1.477). «Prescindo completamente de ellos (los proveedores), porque no son capaces de dar respuesta a nuestro requerimiento«, dijo a Bío Bío Chile, cuando le preguntaron por un artículo de Ciper que establecía que no hay una fecha determinada para la entrega de los ventiladores.
«A la fecha solo han llegado 64 de esas partidas«, afirma Interferencia.
Con la ayuda del consultor en infraestructura hospitalaria, Sergio Teke, jefe de Presupuesto e Inversiones del Minsal en el período de Michelle Bachelet, el diario pudo calcular el inventario de ventiladores disponibles y cuántos llegarán a estar listos a tiempo.
Antes de la pandemia habían 1.229 ventiladores mecánicos para adultos en el sistema público, más 589 de los recintos privados. No obstante, no todos pueden ser utilizados en la recuperación de pacientes con COVID-19, ya que hay parte de la población que los necesita por otras causas.
La tasa de ocupación es de 80%, por lo que solo el 20% de estos equipos -246 ventiladores para el sistema público y 118 para el privado – podrían ser ocupados en pacientes con coronavirus.
Esta cantidad de respiradores, más los 64 nuevos que han llegado, son toda la dotación de la que dispone Chile, sumado a la partida de ventiladores por llegar más importante, que consta de 500 equipos donados por China. Sin embargo, y según el medio, estos deben sortear varios obstáculos antes de arribar a Chile.
También se podrían ocupar los 500 ventiladores que el Gobierno dijo que podría obtener de camas quirúrgicas reconvertidas, pero esto necesitaría que se reprogramaran a lo largo del país todas las cirugías que no son de urgencia.
Si a eso se le suman los 200 ventiladores que se podrían obtener de las UCI de pediatría, daría un total de 1.628 respiradores disponibles para pacientes con COVID-19.
Si se considera, como en el cálculo anterior, que un 5% de los pacientes con coronavirus requerirán de estos implementos para vivir, entonces cuando se llegue a una cantidad de 30.000 pacientes, se necesitarán más de 1.500 ventiladores.
En la situación chilena, eso significaría, según el medio, que todo paciente extra que no pueda acceder a un ventilador equivaldrá a un fallecimiento más por causa del patógeno.