Este miércoles en la noche, el Presidente de la República realizó una conferencia de prensa en La Moneda para anunciar el comienzo del Plan Invierno, un mes antes de lo usual, debido a la emergencia sanitaria que se vive en el país a causa del COVID-19.
En su declaración, Sebastián Piñera aseguró que en Chile hay más de 15.000 personas que viven y duermen en la calle, e indicó que para ellas y ellos sería su primer anuncio.
«Vamos a duplicar el número de albergues«, estableció el mandatario, quien aseguró que dispondrán de 80 nuevos lugares de acogida, con más de 1.000 camas adicionales, a lo largo del país. Así también, afirmó que estos refugios funcionarán también durante el día.
«Además, hemos definido rutas de atención, con personal médico especializado, para atender a cuatro mil personas al día«, dijo Piñera.
Por otra parte, el jefe de Gobierno anunció una segunda medida, para castigar con mayor severidad a quienes «en forma muy irresponsable, ponen en peligro su vida y la de los demás», al infringir las disposiciones de salud durante la emergencia que atraviesa el país debido al coronavirus.
Así, comunicó que en los próximos días presentará un proyecto al Congreso, «para hacer más duras las sanciones para quienes no cumplen con las normativas sanitarias«.
Dentro de los nuevos castigos a los que podrían exponerse quienes no respeten la utilización obligatoria de elementos de protección en determinados lugares, o que rompan normas de cuarentena y aislamiento, estaría la obligación de prestar servicio comunitario en los consultorios y hospitales.
Así lo afirmó y recalcó el mandatario, quien terminó diciendo que «lo menos que uno espera de todos nuestros compatriotas es que cumplan con las disposiciones de la autoridad».
Por último, y cuando le preguntaron sobre quienes viajaron en helicóptero en Semana Santa para evitar los controles sanitarios, por ejemplo, el Presidente replicó que «los que se sienten con los derechos de pasar por encima de los demás van a tener su castigo (…) el Gobierno va a identificarlos y sancionarlos, porque su conducta no tiene perdón de Dios«.