Aguas Andinas oficializó, durante las últimas horas, su decisión de que trabajadores de la compañía inicien un proceso de confinamiento voluntario con el propósito de asegurar el suministro de agua potable en Santiago.
De acuerdo a lo informado a través de un comunicado de prensa, la compañía implementó un sistema de instalaciones de emergencia que serán habitadas por algunos de sus empleados en sus recintos, una medida adoptada con la intención de enfrentar la etapa más adversa derivada de la crisis sanitaria generada por la pandemia del coronavirus.
La determinación adoptada por la administración de la empresa se basa en el levantamiento de campamentos operativos y de descanso en sus distintas plantas de producción de agua potable, además de sus biofactorías, recintos corporativos y en sus compañías filiales.
“En los primeros, el personal cumplirá con sus funciones laborales, dispondrá de un sector habilitado para hospedarse durante el tiempo que dure su turno de trabajo y contará con la distribución adecuada para evitar riesgos de contagio”, aseguraron desde Aguas Andinas.
Adicionalmente, se habilitarán campamentos-habitaciones para que los trabajadores incluso puedan sus días libres en estas instalaciones.
“Ello se llevará a cabo en recintos propios o externos que Aguas Andinas habilitará especialmente y con exclusividad para estas personas, quienes contarán con evaluaciones médicas diarias, pruebas de PCR, apoyo psicológico para ellos y sus familias, y con la alimentación e hidratación adecuada, a través de la asistencia de especialistas en nutrición y alimentación”, agregaron desde esta compañía en declaraciones recogidas por Biobío.
Esta iniciativa, comentan, busca mantener a los trabajadores en aislamiento, sobre todo a aquellos que estén a cargo de labores críticas para que no se contagien. Y si esto llegara a suceder, la idea es detener la infección para proteger a las personas y la comunidad con la que convivan.
“Hemos desplegado todas las medidas necesarias para evitar el contagio de coronavirus entre nuestros trabajadores y así asegurar el suministro de cara a la comunidad. Seguiremos en esa línea y no escatimaremos en (esfuerzos para) sumar todas las medidas que nos permitan llevar el agua hasta los hogares de la ciudad en medio de esta crisis, ya que es un elemento que cobra doble importancia al ser clave para combatir esta pandemia», aseguró Daniela Rebolledo, subgerenta de continuidad de servicios de Aguas Andinas.