Un lapidario y preocupante informe entregó María José Zaldívar, ministra del Trabajo, indicando que más de medio millón de personas han visto suspendidos sus trabajos y, por consiguiente, sus sueldos, durante la emergencia sanitaria por la pandemia del COVID-19.
La titular de la cartera entregó el primer balance de la Ley de Protección al Empleo, confirmando que son 66.573 las empresas que se plegaron a esta normativa, haciendo que 516.826 empleados tuvieran que acudir a su Seguro de Cesantía para costear sus sueldos.
“Este es un dato que nos complica muchísimo. Independientemente de cuántas son las tasas de despidos, las solicitudes al Seguro de Cesantía no son lineales y no lo son porque nos indican que al mes siguiente la persona consiguió trabajo o sus ahorros le sirvieron para sortear ese periodo, pero eso no está pasando hoy día”, declaró Zaldívar.
En relación a las grandes empresas del retail o equipos de fútbol importantes (como Blanco y Negro en Colo Colo), que se han acogido a esta ley, la ministra evidenció que sólo un 1,3% de las empresas son catalogadas como grandes, pero ellas aportaron un 30% de trabajadores con contrato suspendido al total.
“En la práctica, los datos han demostrado que no es efectivo que esta ley esté siendo usada de manera intensa por las grandes empresas, mayoritariamente la están usando y las pequeñas y las medianas empresas y ése es el foco y eso es lo que nosotros tenemos que tener presente«, declaró la secretaria de gobierno.
«Mayoritariamente no vemos un abuso de la ley y en caso de que hubiese abuso existen las sanciones y existen los mecanismos para poder controlar que aquel abuso no se verifique«, cerró.