El Partido Progresista (PRO) se sumó ayer jueves al banderazo de cierre de la campaña por el Apruebo y Convención Constitucional, convocado por los comandos de los partidos de oposición Chile Aprueba, Que Chile Decida y Yo Apruebo, junto al Comando Nacional de Trabajadores.
En la ocasión, Marco Enríquez-Ominami reiteró la urgencia de hacer un solo pacto de la izquierda, agregando estar convencido de que el gran empresariado de Chile es parte del problema, pero que, al mismo tiempo, es el que hacen posible el desarrollo de la economía y la generación de empleos, conminándolo a ser parte de este proceso si de verdad aspiran a la evolución del país.
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Al mismo tiempo, el líder del PRO instó a “la unidad de la oposición”, agregando que “a partir del lunes, Sebastián Piñera será minoría y tendrá que aceptar las voces de la calle y las voces de la oposición organizada”.
“El nuevo Chile llegará después de la próxima elección presidencial, a partir del lunes viene otro Chile, un Chile en que el pueblo se pone de pie, toma sus decisiones y se hace responsable”, puntualizó Enríquez-Ominami, quien además ofició como vocero del PRO en la campaña del partido por el Apruebo.