Incendio Forestal | Agencia Uno
Este domingo, un siniestro de proporciones afectó al Fundo Monterrey en Curacaví y su columna de humo se pudo apreciar desde todo Santiago. La Onemi decidió prolongar la Alerta Roja y el acusado de iniciar el fuego, tras un descuido en un asado familiar, quedó en libertad, pero no podrá acercarse al lugar.
La Intendencia de la Región Metropolitana, en base a la información técnica proporcionada por CONAF y en coordinación con la Dirección Regional de ONEMI, mantiene la Alerta Roja para la comuna de Curacaví, por un incendio forestal que se encuentra activo desde el domingo 28 de febrero.
De acuerdo con la información proporcionada por la Corporación Nacional Forestal (CONAF), se trata del siniestro que afecta al “Fundo Monterrey”, que consume una superficie aproximada de 500 hectáreas de vegetación en la comuna de Curacaví.
Cabe señalar que este incendio se encuentra contenido, con baja intensidad y sin presentar rebrotes y tampoco una propagación significativa. Además, se informa que se mantienen puntos calientes dentro del perímetro, por lo que continuará el combate del incendio durante la noche con una brigada nocturna, para el monitoreo y resguardo de viviendas.
En el Juzgado de Garantía de Curacaví fue formalizado el hombre acusado por el Ministerio Público de ser el responsable del incendio forestal que afecta a esta comuna, y que de momento alcanza a unas 500 hectáreas.
Durante la audiencia, el tribunal decretó las medidas cautelares de firma mensual, arraigo nacional y prohibición de acercarse durante cinco días al lugar de los hechos.
En la audiencia de formalización de la investigación, el magistrado Álvaro Mardones Barría acogió las cautelares solicitadas por la Fiscalía, al considerarlas apropiadas y proporcionales a los fines del procedimiento. Además, fijó un plazo de investigación de 90 días.
De acuerdo a los antecedentes del Ministerio Público, el pasado domingo a las 14:00 horas, el imputado “se encontraba en una parcela ubicada en la comuna de Curacaví correspondiente a un sitio rural, donde comenzó a realizar un asado en el cual colocó carbón y encendió fuego en forma negligente y sin las precauciones debidas para evitar su propagación hacia la vegetación existente en el lugar”.
“A raíz de esto y producto de una chispa llevada por el viento, el fuego encendió la vegetación cercana provocando un incendio que se propagó por al menos 500 hectáreas destruyendo parte de bosques, pastos, montes, construcciones y bienes pertenecientes a terceros”, añadió el ente persecutor.
