Desbordes y Lavín se desmarcan de Piñera y piden al gobierno que se margine de la carrera presidencial

La jornada de este miércoles ha estado marcado por las definiciones políticas de la centro izquierda, con anuncios relevantes en partidos como la DC y el PS, que se materializan a 72 horas de las elecciones del fin de semana, que generaron un nuevo entramado del que los distintos conglomerados buscan salir lo menos dañados de cara a las elecciones presidenciales del 21 de noviembre.

De esta manera y considerando que el voto ciudadano castigó severamente a los partidos, el ámbito político se mantiene convulsionado en medio de reuniones que han redundado en inesperadas determinaciones. Como lo ocurrido hoy con la oficialización del apoyo del ahora ex candidato presidencial, Pablo Vidal, a la apuesta de Paula Narváez, un hecho que se suma a las horas claves que enfrenta la DC de cara a la esperada renuncia de su abanderada Ximena Rincón a la carrera presidencial. De materializarse su renuncia, el partido falangista podría retomar sus conversaciones con Yasna Provoste para que sea ella quien asuma el desafío de suceder a Sebastián Piñera, lo que ocurre mientras en la vereda de enfrente también hay movimientos.

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Aunque a un ritmo menos vertiginoso, las piezas también se mueven en el oficialismo, desde donde las candidaturas presidenciales empezaron a ser inscritas esta mañana en el Servel, de cara a las primarias del sector.

Con cartas como Ignacio Briones, Sebastián Sichel, Mario Desbordes y Joaquín Lavín intentando mantener el control de la centro derecha en La Moneda, donde ya alistan un cambio de gabinete para este jueves, acusando el golpe de derrotas de envergadura, como es el caso del frustrado paso por el Tribunal Constitucional del tercer retiro del 10%, a lo que se suma la magra votación alcanzada por Chile Vamos el fin de semana en las urnas, las candidaturas se activan.

Paralelamente al complejo escenario, se adicionan las permanentes evidencias de la  debilitada gestión presidencial, traducida en niveles de aprobación históricamente bajos para la segunda administración de Piñera, que ahora enfrenta una particular solicitud de dos de las apuestas presidenciales de su propio sector.

Específicamente y de acuerdo a la información transparentada en las últimas horas, tanto Desbordes como Lavín le solicitaron al gobierno que se mantenga al margen de la carrera presidencial.

«El gobierno debe mantenerse al margen, debe administrar lo que está haciendo hoy con el combate de la pandemia. Tiene que hacer un esfuerzo mucho mayor en materia de ayuda a la clase media y sobre todo a la pyme, que está en el suelo», dijo al respecto el ex ministro de Defensa, distanciándose del Ejecutivo.

En este sentido y de acuerdo a lo que publica este miércoles El Mostrador, la expectativa del abanderado de RN es que en La Moneda se dediquen a «hacer su trabajo y no involucrarse en esta carrera presidencial en donde los candidatos de nuestro sector tienen que hacer el papel más importante».

Por su parte, el ex alcalde de Las Condes no disimuló su necesidad de desmarcarse de la administración de Piñera. «Creo que lo mejor que puede hacer el gobierno es mantenerse al margen y solamente permitir que las cosas funcionen bien, creo que es un momento muy difícil para Chile», dijo refrendando que su planteamiento es el que sintoniza con lo que está pasando hoy en el país, publica Biobío.

«Uno siempre quisiera que los candidatos nos trataran mejor»

Con las cartas sobre la mesa y acusando recibo de un mensaje que no otorga lugar a dobles lecturas, el ministro de Segpres, Juan José Ossa se refirió al tema en Agricultura. “Uno siempre quisiera que los candidatos presidenciales del sector de uno, que dicho sea de paso todos han sido ex ministros del Presidente Sebastián Piñera, nos trataran mejor», admitió.

No obstante lo anterior, matizó sus declaraciones asegurando que esta es “siempre una aspiración legítima, razonable, pero también entendemos dos cosas: por un lado los candidatos son candidatos, los gobiernos son gobiernos. Los candidatos tienen programas, los gobiernos tienen que hacer políticas públicas».