Como «fuera de lugar» calificó la senadora RN, Marcela Sabat, el veto del Ejecutivo al proyecto de su autoría, ya despachado por el Congreso para su promulgación, del texto que establece como prioridad el trabajo a distancia para el cuidado de menores de 12 años, o de personas con discapacidad en caso de catástrofe o pandemia.
En específico, sus declaraciones se dan en razón de que el gobierno envió un veto para que esta iniciativa no aplique para los funcionarios públicos.
Respecto de los hechos, la parlamentaria fue clara al cuestionar al Ejecutivo. «Este veto es una mala noticia, es discriminatorio, y va en contra del origen del proyecto que fue trabajado con organizaciones de mujeres, el mismo gobierno, y de forma transversal en el congreso, para que madres y padres que pueden teletrabajar puedan optar por esa alternativa para el cuidado de sus hijos», dijo.
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Adicionalmente aseguró que «con esto, se obliga a las trabajadoras del sistema público a volver a sus funciones, en circunstancias que el riesgo sanitario sigue vigente, y a que también son pocos los establecimientos educacionales que tienen clases presenciales todos los días. Es una complicación mayúscula para este sector, que no tendría la opción de cuidado para sus hijos e hijas».
Finalmente, la parlamentaria compartió su expectativa de que en el «Congreso se rechace este veto y el proyecto sea promulgado tal como está, pues la iniciativa instala un nuevo sistema de cuidado a cargo del Estado que no hace distinciones ni discrimina por el tipo de empleador que tengan las personas».