Mecanismo de reemplazo: La pugna en el Senado que aún impide la renuncia de Rojas Vade

Este miércoles el Senado tenía agendada la votación del proyecto de ley que permitiría la renuncia oficial del convencional constituyente Rodrigo Rojas Vade a su escaño en la Convención Constitucional (CC).

Sin embargo, la tramitación de la iniciativa fue dilatada luego de que oposición y oficialismo no lograron un acuerdo respecto al mecanismo de reemplazo de los puestos vacantes en el órgano constituyente.

Este proyecto de ley requiere un amplio consenso para avanzar, debido a que implica una reforma constitucional, lo que tiene que ser aprobado por dos tercios de los senadores, es decir 26 votos a favor.

Ante este escenario y la dificultad para lograr la aprobación, no se produjo la votación y solo se abrió el debate, instancia que tuvo tres intervenciones en la línea de determinar el futuro de la moción parlamentaria.

Finalmente, por una propuesta del senador Álvaro Elizalde, se planteó discutir el viernes en una reunión de comités parlamentarios la idea de separar el proyecto en dos: una parte sobre permitir renuncias, donde existiría acuerdo; y otra sobre el mecanismo de reemplazo, donde persiste una pugna.

«Se va a instalar la idea de que el Congreso no hizo nada para resolver este problema (…) Las bancadas del oficialismo están en contra de un mecanismo de reemplazo respecto a las listas de independiente y por tanto se terminaría cayendo el proyecto en su conjunto», afirmó Elizalde.

La renuncia de Rojas Vade

El constituyente Rojas Vade anunció su renuncia al órgano encargado de redactar una nueva Constitución después de que reveló que mintió por años sobre un falso padecimiento de cáncer, lo que le valió críticas transversales y el repudio generalizado.

Ante esto, Rojas Vade anunció que dejaría de asistir a las actividades de la CC hasta que exista un mecanismo oficial para poder renunciar, debido a que hasta el momento las únicas causales aceptadas son las de incapacidad física y psíquica.

Pese a que la CC ya definió en su reglamento una serie de motivos de renuncia que deben ser aprobadas por el pleno del organismo, es el Poder Legislativo el encargado de hacer estas modificaciones en la Constitución.

Frente a esta situación, la senadora Ximena Rincón (DC), junto al senador Carlos Bianchi (ind.), Francisco Huenchumilla (DC), Carlos Montes (PS) y David Sandoval (UDI) presentaron un proyecto para modificar la Constitución y permitir la renuncia de un convencional.

Esta iniciativa luego fue refundida con otra similar presentada por los senadores socialistas Álvaro Elizalde, José Miguel Insulza y Juan Pablo Letelier.

Ante las críticas respecto a que meses después de su renuncia Rojas Vade sigue recibiendo su dieta de convencional constituyente, su abogado, Tomás Ramírez, afirmó a Radio Biobío: “Sin hacer ningún emplazamiento, porque no me corresponde, la forma más sencilla de evitar que él reciba el sueldo es que se apruebe el proyecto de ley que le permitiría renunciar”.

Desacuerdo en el Senado

El proyecto de ley presentado en el Senado plantea que un constituyente puede renunciar «cuando hecho graves afecten su desempeño o pongan en riesgo el funcionamiento de la Convención Constitucional y así lo califique el Tribunal Calificador de Elecciones (Tricel)».

Posteriormente, la iniciativa indica que sería ocupada la vacante disponible por el candidato o candidata de la misma lista que el renunciado que le haya seguido en la elección y que sea de su mismo sexo, para seguir la lógica de la paridad. Este punto referente al reemplazo es el que ha estancado el debate.

En su último trámite legislativo la iniciativa fue estudiada en general en la Comisión de Gobierno, Descentralización y Regionalización, con la participación de diversos especialistas constitucionalistas y asesores, instancia en que se debatieron los desacuerdos en torno a que los constituyentes estén sometidos a las mismas normativas de vacancia que los parlamentarios.

La principal disyuntiva que se manifestó en ese debate fue que las listas de independientes no cumplen con todos los requisitos que los partidos políticos para asegurar su «legalidad», por lo que existen distintas opiniones respecto a si deben tener la facultad de designar a un reemplazante en caso de la vacancia de un escaño, como ocurre en los casos de diputados y senadores. El proyecto fue aprobado en la comisión por tres votos de oposición a favor y dos de oficialismo en contra.

Sobre este tema, el senador Iván Moreira (UDI) afirmó al medio ya mencionado: «Este proyecto es un traje a la medida para ayudar a la izquierda en la Convención. Tiene que haber un mecanismo de reemplazo, pero en ningún caso en los términos que se plantea».

Por su parte, el parlamentario independiente Carlos Bianchi respondió que «el hecho de tener un voto menos de los constituyentes al parecer a la derecha le parece altamente atractivo, altamente conveniente».