Abogada María José Martabit demanda al estudio jurídico Carey por discriminación de género

La abogada especialista en propiedad intelectual y política públicas María José Martabit presentó una demanda contra el bufete Carey, uno de los más importantes del país, por discriminación laboral y de género.

Martabit, quien es profesora de la Universidad Católica, presentó esta acción judicial luego que se le impidiera postular para ser socia de Carey, para posteriormente ser despedida de la oficina. De acuerdo a la demanda, mientras trabajó en la firma recibió una evaluación de excelencia por su desempeño.

Martabit detalló en la demanda que, tras informarle al socio de la oficina Guillermo Carey su intención de ser socia, este le dijo que «era muy difícil postular a otra mujer candidata y que no saliera elegida, como había sucedido en el pasado», según información de La Segunda.

Aunque Carey la apoyó en ese momento, pese a los comentarios, posteriormente la llamaron para decirle que instancias superiores de la oficina le recomendaban no postular porque no contaría con el apoyo necesario para ser seleccionada.

El 13 de septiembre, solo días después de haber sido notificada de esto, se le informó a Martabit que había sido despedida de la importante oficina de abogados.

La demandante afirmó: «Las mujeres no son elegidas, y cuando les piden estar en la papeleta, les dicen que no y luego las despiden (…) Es brutal».

La respuesta de Carey

«La salida de Martabit no tiene relación alguna con discriminación por género ni con libertad de expresión, ni se le han vulnerado otras garantías legales. Las razones (…) serán informadas cuando corresponda y ante la instancia judicial correspondiente«, fue la contestación de la oficina de abogados.

Además, Carey agregó que en su sociedad promueven la diversidad, tiene una política antidiscriminación y de igualdad salarial, junto con destacar que fueron de los primeros estudios en nombrar socias mujeres.

Sin embargo, la demandante María José Martabit expuso en su acción judicial que, aunque han habido avances en inclusión de género, en las instancias más altas las mujeres aún tienen bajísima participación, lo que se ve reflejado en que 90% de los socios son hombres y solo cuenta con directores de este género.