Fundación para la Confianza afirma que desde hace meses apoya a denunciante contra Berríos

Este miércoles, la Fundación para la Confianza informó que ha participado desde hace meses en el proceso de denuncia contra Felipe Berríos que ayer gatilló el inició de una investigación en su contra por parte de la Iglesia Católica.

Según informó la noche de este martes la congregación de la Compañía de Jesús, «el 29 de abril se recibió una denuncia de una mujer adulta en contra del jesuita Felipe Berríos por hechos de connotación sexual. Tales sucesos habrían ocurrido cuando la denunciante era menor de edad». Producto de la acusación, la institución suspendió el ejercicio religioso público de Berríos e inició un proceso investigativo.

En paralelo a este anuncio, la Fundación para la Confianza comunicó que «hemos acompañado de forma integral a la denunciante, por lo que el pasado viernes (…) presentamos una denuncia canónica ante el Arzobispado de Santiago«.

El abogado de la fundación, Juan Pablo Hermosilla, complementó que «efectivamente nosotros (…) hemos estado apoyando desde hace algún tiempo a esta joven que decidió denunciar a Felipe Berríos canónicamente», de acuerdo a información de CNN Chile.

«Deseamos que esta investigación se pueda desarrollar en el marco más expedito de transparencia y eficiencia posible por parte de la Compañía de Jesús y que se logre prontamente determinar la veracidad de los hechos denunciados», agregó el abogado.

Por su parte, Valentina Correa, directora ejecutiva de la organización, añadió que «nuestra posición como organización está con la víctima (…) en nuestra organización siempre van a estar abiertas las puertas para las personas que quisieran contar su historia y encontrar aquí un lugar de acompañamiento y acogida».

La investigación contra Berríos

La indagatoria llevada por la Iglesia Católica quedó a cargo de la abogada María Elena Santibáñez, quien aseguró a La Tercera que «se trata de una investigación previa y que tal como se me encomendó se hará con la mayor rigurosidad y celeridad posible».

Este proceso contra Berríos ha golpeado de manera importante a los Jesuitas por el rol relevante que el cura revestía para la congregación. «La importancia de Berríos era radical en cuanto a lo que tenía que ser un sacerdote, que es trabajar por la gente más desposeída o levantar efectivamente las alternativas para personas que no lo tenían en el sistema», sostuvo el teólogo Marcial Sánchez al medio ya mencionado.

«Este es un golpe fuerte para el mundo jesuita, es una situación que sinceramente creo que les debe haber costado mucho sopesar, y están sopesando hasta el día de hoy», agregó Sánchez.

El también historiador concluyó que «Berríos era uno de los últimos bastiones creíbles de la Iglesia, seguido por mucha gente. Lo que viene a pasar ahora con él, en la medida que siga esta investigación obviamente, no es un caso más. Yo creo que es como la gota que rebalsó el vaso (…) A la última persona que podía sucederle una situación así, para muchos, era él».