Raúl Soto desmiente que pretenda seguir presidiendo la Cámara en desmedro de Karol Cariola

El presidente de la Cámara de Diputadas y Diputados, Raúl Soto (PPD), salió al paso de las versiones sobre el debate que ha generado la sucesión en la mesa de la Corporación que lidera.

Soto insistió en que el acuerdo establecido para definir la presidencia de la Cámara debe cumplirse, lo que implicaría que quien asumiera este cargo fuera la diputada del Partido Comunista (PC), Karol Cariola, un nombre que ha generado cierta incomodidad en sectores más conservadores del Congreso, desde donde transcurridos los meses de zanjada la rotación en el cotizado puesto, ahora buscan alternativas para evitar que la parlamentaria asuma.

Lo que ocurra finalmente con esta sucesión, es parte de un proceso que comienza el 21 de octubre y culmina el 7 de noviembre. En cuanto a si se cumple o no lo estipulado previamente entre los integrantes de la corporación al inicio del período parlamentario, Soto aseguró a Radio Duna que “los compromisos son para cumplirse. Yo doy por cumplido mi ciclo, mi período dura hasta el 7 de noviembre”.

Y a renglón seguido, aseguró que, en consecuencia, se alejará del cargo como corresponde. “Presentaré mi renuncia de forma indeclinable. Soy una persona de palabra, seria y cumplo mis compromisos”, sostuvo apelando al resto de las fuerzas políticas presentes en el Congreso.

“Ahora espero que las bancadas sean capaces de ordenarse, de ponerse de acuerdo, de dejarse de hablar por los medios y de conversar para que el acuerdo que se firmó en su momento tenga los resguardos para que el acuerdo administrativo siga dentro de las fuerzas políticas”, sostuvo luego apegándose a lo pactado en marzo del año en curso.

Y agregó que deja el ejercicio de esta responsabilidad con una buena sensación. “Me voy con la conciencia tranquila y el deber cumplido. Creo que en un período difícil para el Parlamento y la política en el país, hemos logrado dar seriedad institucional al rol de la Cámara, con imparcialidad y equilibrio. Creo que de alguna manera hemos contribuido con un granito de arena para reivindicar la buena política en Chile”.

Finalmente, consultado si Cariola debiera ser la próxima presidenta de la Cámara, Soto se circunscribió a lo pactado. “Eso es lo que tienen acordado las bancadas y eso es lo que tienen que conversar. A mí lo que me importa es que todas las fuerzas políticas que están en este acuerdo administrativo se sienten a conversar y resuelvan las cosas que han salido, los trascendidos” que ha habido a través de la prensa.

En este sentido, cuando le preguntaron respecto de los cuestionamientos a la figura de Cariola, específicamente si este tiene que ver con su militancia o su rol como vocera del Apruebo en el contexto del Plebiscito del 4 de septiembre, Soto fue cauto.

“No me corresponde a mí señalarlo, lo que sí digo es que insto a las fuerzas políticas parte de este acuerdo a resguardar su cumplimiento. Y que el acuerdo continúe dentro de las fuerzas que lo suscribieron, porque la palabra empeñada debe cumplirse”, dijo al tiempo que planteó que “eso significa que tanto las fuerzas políticas del oficialismo, como la Democracia (Cristiana) y el PDG deben sentarse a conversar para dar una salida razonable a los problemas que están trascendiendo por los medios de comunicación”, agregó el parlamentario.

Las versiones que circulan

Las declaraciones de esta mañana de Soto, parecen otorgar certeza respecto de su postura ante el cambio de presidencia en la Cámara, aferrada a los acuerdos suscritos con antelación. Sin embargo, desde el interior del Congreso algunas voces como la del diputado René Alinco, han sembrado un manto de duda en relación a sus intenciones reales.

Específicamente, de acuerdo a una nota de La Tercera, actualmente el presidente de la Corporación se encuentra silenciosamente abocado a una serie de conversaciones “oficina a oficina” entre sus colegas, para que no acepten su renuncia, visualizando la posibilidad de permanecer en el cargo durante un nuevo período, en desmedro de la cuestionada Cariola.

“Es un secreto a voces, los diputados, las diputadas, los funcionarios lo saben, todo el mundo sabe en este Congreso que el diputado Raúl Soto quiere seguir como presidente de la Cámara”, fue parte de la declaración que hizo el diputado.

Incluso, el parlamentario por la Región de Aysén se atrevió a comentar que el militante del PPD “anda trabajando, haciendo un ‘casa a casa’, un ‘puerta a puerta’, un ‘oficina a oficina’, diciendo que existe la posibilidad o pidiendo concretamente que su renuncia la sala no se la acepten”.

De hecho, el jefe de la bancada UDI, Jorge Alessandri, ratificó que la posibilidad de que se rechace la renuncia de Soto para evitar que en su relevo asuma Cariola, es una idea que anda rondando.

Tanto así que tal como lo terminó admitiendo el parlamentario gremialista, este tema lo ha abordado con el actual presidente de la Cámara. “He sabido por versiones de prensa que una idea del diputado Raúl Soto es justamente seguir en el cargo. Se ha hablado hasta el 11 de marzo. Se ha hablado de un mes y medio para terminar de firmar el acuerdo constitucional”, dijo atendiendo al rol que ejerce el parlamentario en la mesa negociadora.

Paralelamente, y tras los dichos de Alinco, Alessandri dijo que no estila transparentar diálogos privados. “Las conversaciones personales que tengo con las autoridades no las revelo en público. Pero hemos hablado muchas veces con el diputado Soto y una de las materias que hemos tocado es justamente esta”, reconoció.

Mientras tanto, consultado el aludido insistió en sus credenciales, relevando quién es. “Soy una persona seria y no me hago cargo de cosas que se pueden comentar en los pasillos, de cosas que uno u otro puede estar opinando. Acá son las bancadas las que tienen que tomar las definiciones de qué va a pasar con el futuro de la Cámara. Lo que sí puedo asegurar que soy una persona seria, de palabra, el 21 de octubre presento mi renuncia”, sostuvo.

Acuerdo constitucional

Soto además abordó el esperado acuerdo para implementar un nuevo proceso constituyente.

En este contexto, señaló que «insto a las fuerzas políticas que son parte de este acuerdo administrativo a resguardar su cumplimiento y que el acuerdo continúe dentro de las fuerzas que suscribieron el acuerdo, porque la palabra empeñada debe cumplirse y eso quiere decir que las fuerzas políticas tanto del oficialismo, como el PDG y la Democracia (Cristiana) deben sentarse a conversar para dar una salida razonable a los problemas que están trascendiendo por los medios de comunicación».