El martes de esta semana Cancillería informó la decisión del Presidente Gabriel Boric de otorgar la nacionalidad a los más de 300 nicaragüenses que fueron expatriados por el gobierno de Daniel Ortega.
“Ante la reciente decisión del Estado de Nicaragua de privar de su nacionalidad y derechos políticos a más de trescientas personas nicaragüenses, identificadas como opositoras políticas, el gobierno de Chile arbitrará los medios legales necesarios para ofrecerles la debida protección internacional, que les permita residir en el país y obtener la nacionalidad chilena”, expresaba el documento que anunció la decisión del mandatario.
Pese a que la medida fue celebrada transversalmente por el mundo político, el alcalde de Recoleta, Daniel Jadue (PC), emplazó al jefe de Estado a preocuparse de los problemas en Chile.
“El Gobierno de Chile dijo que era inadecuado que representantes de otros países tengan palabras y opiniones sobre problemas externos. Yo le recomendaría al Gobierno que se preocupe de las problemáticas que hay en el país”, dijo el excandidato presidencial del PC.
La respuesta del Gobierno y Elizalde
En La Moneda no dejaron pasar los dichos del jefe comunal, siendo la ministra del Interior, Carolina Tohá, la encargada de responder, asegurando que Jadue “definitivamente tiene una visión muy distinta de lo que es el compromiso con los derechos humanos de un país”.
En esa línea, la secretaria de Estado expresó que “cuando hay un país hermano, como Nicaragua, donde un gobierno le está quitando la nacionalidad a las personas por pensar distinto, nos acordamos mucho de cosas que vivimos en Chile. En Chile hubo un hombre que se llamó Orlando Letelier que Pinochet le quitó la nacionalidad y después lo mandó a matar y eso le pasó a un chileno”.
Quien también se refirió a la polémica fue el presidente del Senado, Álvaro Elizalde (PS), quien sostuvo que “no podemos tener ningún tipo de doble estándar” en materia de derechos humanos, refiriéndose a los cuestionamientos de Jadue.
“La democracia y los derechos humanos deben ser promovidos y respetados en todas partes, sin distinciones de ningún tipo. Por eso me parece necesario valorar la actitud consecuente del Gobierno del presidente Boric, que ha ofrecido protección y cobijo a quienes hoy son víctimas de persecución en Nicaragua”, expresó el senador.