El Comité para la Prevención de la Tortura (CPT) dio a conocer su segundo informe anual sobre “Prevención de la tortura y situación de las personas privadas de libertad en Chile”, donde entrego
El organismo encabezado por siete expertos analizó muertes en centros penitenciarios, aislamiento y entre ellos la «invisibilidad de las mujeres en el sistema penitenciario«. Aunque aseguran desde la entidad han existido mejoras, aún hay desafíos pendientes.
En el informe de 272 páginas se detalla como «las mujeres privadas de libertad en recintos penitenciarios presentan menores niveles de educación y sus biografías están marcadas por el desempleo y la marginación económica antes del encarcelamiento.
Además, «las cárceles han sido concebidas por y para los hombres, con regímenes, políticas y condiciones de encierro que ignoran las particularidades propias del género femenino, profundizando aún más su invisibilización”.
Ya que Chile es el segundo país de América del Sur con la mayor proporción de mujeres privadas de libertad de América del Sur según estudio del 2022 del World Prison Brief. Además de que el «50% de la población femenina recluida se encuentra en prisión preventiva«, reza el informe.
«El tiempo promedio de permanencia de las mujeres en prisión preventiva es de 6,7 meses y las mujeres condenadas por delitos de droga cumplen condenas que superan los 5 años, pese a la baja efectividad que tiene el tiempo de sanción en la reducción de la reincidencia y el alto costo para quienes experimentan el encarcelamiento, su entorno más cercano y la sociedad en su conjunto”, revelaron.
Esto en el contexto de que un «45% de las mujeres privadas de libertad en Chile ha sufrido situaciones traumáticas
como violencia intrafamiliar y un 26% ha sido víctima de abuso sexual en la infancia o adolescencia».