Estudio del Ejecutivo plantea que el teletrabajo no fomentaría el empleo femenino

En el contexto de una actividad liderada por el subsecretario del Trabajo, Giorgio Boccardo, que contó con la presencia de la ministra de la Mujer y Equidad de Género, Antonia Orellana, se oficializó el «Informe de Conciliación, Trabajo, Familia y Vida Personal», que aborda la situación laboral de las mujeres del país, a través de experiencias y vivencias que organizaciones de la sociedad civil, sindicatos y trabajadoras detallaron como consecuencia del diálogo social tripartito, lo que ha sido sello del Ministerio del Trabajo liderado por Jeannette Jara.

De acuerdo al detalle que entrega un comunicado de prensa, se trata de un levantamiento de información efectuado por «el Ministerio del Trabajo y Previsión Social, con la asesoría técnica de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), en el marco de un proceso participativo y ciudadano desarrollado entre el 26 de septiembre de 2022 y el 3 de enero de 2023, período en el que se llevaron a cabo un total de 13 mesas de trabajo, en las que se inscribieron 161 organizaciones, participando un total de 71 representantes de instituciones, actrices y actores» del ámbito laboral.

Entre sus concluciones, el estudio apunta al potencial del teletrabajo, que en el mercado laboral chileno es aún limitado. De hecho, detalla que el peak del teletrabajo en Chile se produjo en junio, julio y de 2020, alcanzando el 20,3%.

«Sin embargo, el rubro educacional tuvo una gran incidencia en el nivel del indicador, debido al cierre temporal de los establecimientos educativos. Si se corrige por este evento, el máximo empírico del
potencial del teletrabajo en el país, en condiciones de normalidad, es cercano al 15%», asegura el análisis del Ejecutivo.

Y en relación al género, se estableció que mujeres son las que más teletrabajan. «Existe un predominio de mujeres en el ejercicio de modalidades de teletrabajo, el cual se mantiene durante todo el periodo analizado», agrega el informe.

Paralelamente, se concluye que el teletrabajo «no pareciera ser una herramienta capaz de fomentar de forma significativa la empleabilidad femenina».

«El estudio revela que esta no sería una herramienta que beneficie de manera significativa la empleabilidad
femenina, tanto en términos generales, pero, sobre todo, a mujeres de sectores populares, dada la relación
inversa entre esta modalidad, con la formación educativa y el nivel de calificación».

Por otra parte, el reporte agrega que «tanto en 2020 como en 2022, el perfil de las personas que trabajan a distancia desde el hogar, corresponde a trabajadores/as con educación terciaria o superior, y, además, su tipo de ocupación corresponde a directores y gerentes, profesionales científicos e intelectuales. Los rubros feminizados, caracterizados por un menor nivel de calificación, tienen bajo potencial de convertibilidad a teletrabajo».

Medidas para avanzar en el «trabajo decente»

Giorgio Boccardo, subsecretario del Trabajo, asegura que este informe “responde al compromiso» del Ejecutivo de avanzar en materia de trabajo decente, «lo que se conjuga con la agenda del Ministerio de la Mujer y Equidad de Género en cuanto a tener insumos y coordinar políticas públicas que permitan la inserción femenina de manera igualitaria en el mundo del trabajo”.

“Las conclusiones del estudio consideran distintas propuestas que emergieron de las mesas en materias de adaptabilidad, coparentalidad, jornadas híbridas, más fiscalización a jornadas extraordinarias, ‘desfamiliarización’ de los cuidados, teletrabajo híbrido, regularización de bonos compensatorios, sala cuna, ampliar la definición de familia, entre otros», agregó el subsecretario.

Y agregó que estas materias se abordarán principalmente a través de tres medidas, que son «un proyecto de ley que modifique el Código del Trabajo en materia de conciliación de la vida personal, familiar y laboral; concretar la política de Sala Cuna para Chile», además de la implementación «de proyectos piloto de políticas públicas para el reconocimiento del trabajo de cuidados no remunerado en el mercado laboral chileno”.

Por su parte, la ministra de la Mujer y Equidad de Género, Antonia Orellana, enfatizó en la necesidad de «insistir en el diálogo de transversalización de género en el Estado que tenemos como ministerio y gobierno. Son tareas que superan por mucho uno, dos o tres ministerios, es un trabajo y esfuerzo conjunto que se ha hecho en esta mesa”.

.