Ministra de la Mujer espera «buenas noticias” en Ley libre de violencia: 6 años de espera

Este lunes la ministra de la Mujer y Equidad de Género, Antonia Orellana, abordó los avances respecto a la ley sobre el derecho de las mujeres a una vida libre de violencia, que se encuentra en las comisiones unidas de Constitución y Mujer del Senado.

Orellana aseguró ante la prensa del Congreso de Santiago que actualmente se están revisando las 20 indicaciones finales, significando “el último tramo” del proyecto. Asimismo, enfatizó que esta ley es prioritaria para el gobierno.

La secretaria de Estado afirmó respecto de la iniciativa, presentada en el gobierno de Michelle Bachelet por la primera ministra de la Mujer, Claudia Pascual, en enero de 2017, que seis años después “lamentablemente seguimos tramitándola” en el Congreso.

Objetivos y beneficiados

Entre los objetivos de esta ley está mejorar tiempos de respuestas institucionales que hoy se ofrecen a las mujeres víctimas de violencia en protección, atención y reparación; entregar ofertas adecuadas de acompañamiento psicosocial y jurídico tanto de mujeres como a sus hijos;

En La Comisión del Senado que en 2021 analizó 500 indicaciones del proyecto, uno de los puntos más valorados fue avanzar hacia los alcances del maltrato a las mujeres, considerando maltrato todo aquello que vaya «contra la vida, la integridad física o psíquica», pero también contra la libertad o indemnidad sexual y subsistencia o autonomía económica del agresor.

También incluyó dentro de la violencia intrafamiliar cuando la acción recae en un menor de edad, adulto mayor o persona con discapacitada en relación de dependencia de un cuidador en el grupo familiar.

Boric recuperó urgencia

“Recuperamos la urgencia durante el año pasado y actualmente estamos ingresando ya a los últimos 20 artículos de discusión”, agregó Orellana.

“Esperamos poder tener un acuerdo transversal en la Cámara, al igual que lo hemos tenido en el Senado, respecto a la importancia de esta norma”, comentó.

“A la importancia de mejorar la protección de las cautelares, a mejorar el seguimiento de las cautelares de protección, a mejorar los procesos judiciales para las víctimas, a incorporar a niños y niñas como víctimas y no sólo como testigos, y sobre todo a crear un sistema de atención que no signifique tocar siete puertas al mismo tiempo. Esos son los principales contenidos de nuestra ley”, destacó.

Por otro lado, indicó que “hemos ido avanzando quizás más lento de lo que nos gustaría por la premura que tenemos nosotras siempre, pero sabemos que esto es una ley que va a beneficiar sobre todo a las víctimas, que va a entregar mayor confianza a la justicia y va a entregar mayores herramientas para el acompañamiento”.

Sobre las comisiones unidas, señaló que “sesionamos juntos para poder avanzar más rápido y nos vamos a meter ya en el último tramo de 20 indicaciones y por lo tanto esperamos prontamente poder tener buenas noticias sobre todo en este mes, que es el mes contra la violencia hacia las mujeres”.

Caso de Matías Fernández

Respecto al caso del futbolista Matías Fernández Cordero, denunciado el domingo por violencia intrafamiliar (VIF), la ministra Orellana afirmó que “hasta el momento no hay formalización. Nosotros estamos buscando, como siempre, el contacto de la víctima”.

“El Servicio Nacional de la Mujer y Equidad de Género, que atiende a 60.000 mujeres al año respecto a violencia en cuanto a orientación, representación jurídica y atención psicosocial, no puede presentar demandas, no puede representar en audiencias sin que primero comparezca la víctima y nos dé esa autorización”, agregó.

“Una de las cosas que queremos cambiar en la ley integral es que podamos llegar antes a los procesos judiciales porque a veces eso produce que nos demoremos”, añadió.

Por otro lado, Orellana señaló que desde el Ejecutivo “queremos recordar que cualquier tercero puede denunciar violencia contra las mujeres, no es necesario ser familiar directo ni estar viendo. Un vecino que escucha puede marcar la diferencia”.

También lamentó que “actualmente no hay ninguna ley que obligue a las instituciones deportivas a tomar acciones en caso de denuncias como esta, contractuales u otras. Pero, tal como nos muestran equipos en otras latitudes, no es necesario que la ley obligue para poder tomar una posición respecto a lo inaceptable que es la violencia contra las mujeres”.