Las esquirlas del discurso de Ibáñez y su autocrítica: “Estoy dispuesto a mejorar cualquier aspecto”

“Con cariño diputados del partido Demócratas: no se dejen iluminar por la senadora Ximena Rincón, ex directora de AFP Provida, porque ustedes aquí no tienen conflictos de interés. Y el gobierno sí acogió su propuesta de 3-3, completita. Ustedes la pidieron y el gobierno la timbró. Entonces ¿Por qué rechazar? Que no los obliguen a traicionar su palabra empeñada”.

Esas fueron las palabras que pronunció previo a la votación de la reforma de pensiones el diputado y presidente de Convergencia Social (CS), Diego Ibáñez, y que desataron la furia de los personeros del Partido Demócratas. Un capítulo político que en las últimas horas terminó desviando la agenda comunicacional desde la reforma previsional a la crisis interna del oficialismo.

En condiciones normales, el emplazamiento del diputado no hubiese causado mayor controversia. Sin embargo, la crítica de Ibáñez a la senadora y presidenta de Demócratas se dio en un complejo y crucial momento para el gobierno: se necesitaban los votos de los 6 diputados de la bancada del partido de Rincón para que se aprobara en general el proyecto.

El revuelo generado por la intervención Ibáñez fue tal, que la sesión debió ser suspendida. “Pendejo”, “tonto”, inmaduro”, le gritaron desde la bancada de Demócratas.

Pero la polémica no quedó ahí y siguió escalando.

La diputada Joanna Pérez, jefa de bancada de Demócratas aseguró que su partido congelaría las relaciones con el gobierno. Además, la misma Rincón exigió disculpas públicas, haciendo hincapié en que la figura de Ibáñez es especialmente relevante por ser el “presidente del partido de Boric”.

Ministra Carolina Toha Camila Vallejo conversan con Diego Ibañez durante la sesión que crea un nuevo Sistema Mixto de Pensiones. Agencia Uno.

Matías Walker, senador y vicepresidente de la colectividad, también apuntó sus dardos contra el timonel de CS y calificó su intervención en la Cámara como un ataque “gratuito, artero, ofensivo e infantil”.

“Esa lógica adversarial de los enemigos es lo que nos molesta. Porque ni yo ni la senadora Rincón jamás le dijimos a nuestros diputados cómo tenían que votar. Siempre les dijimos que este proyecto estaba alojado en la Cámara de Diputados, que íbamos a respaldar la decisión que tomaran”, aseguró Walker en entrevista con radio ADN.

Las explicaciones de Ibáñez

Casi a las 18.00 horas de este jueves, y tras reiteradas peticiones de la prensa, el diputado Ibáñez decidió dar sus descargos a través de una declaración pública.

En ella, parte destacando el trabajo de los ministros Mario Marcel y Jeannette Jara, y que se haya aprobado la reforma en general, pese a las complejidades que supuso obtener los 78 votos.

“Se logró con dificultad, pero avanzamos y pese a todas las diferencias legítimas que tengamos con el Partido Demócrata, no debemos desviarnos de lo central, que es poner a las familias en el centro del debate”, agregó.

Ibáñez, en esa línea, sostuvo que “siempre estaré disponible para conversar sobre la manera de hacer política, de mejorar en cualquier aspecto que sea necesario, porque eso es lo que Chile hoy espera de nosotros, de la política, y nadie debe estar por sobre ello”.

“Vamos a continuar trabajando en lograr los mayores acuerdos posibles para que se cumplan, estar a disposición y así llegar a que las pensionadas y los pensionados de nuestro país logren sus anhelos, que es tener una jubilación digna. No me cabe duda de que Demócratas, al igual que nosotros, va a poner ese objetivo por sobre cualquier otra discusión”, concluyó.

Fuego amigo

Las críticas no llegaron solo desde los adversarios. También figuras de Socialismo Democrático cuestionaron al presidente de Convergencia por sus declaraciones y haber puesto “en riesgo” la reforma de pensiones.

“Fue una irresponsabilidad del porte de un buque. El presidente del partido del Presidente de la República no puede poner en riesgo la reforma más importante del gobierno por un gustito político, por hablarle a las galerías, a su electorado (…) Gobernar no es un juego. Legislar tampoco. Ya está bueno que todos asuman el peso de la responsabilidad que implica”, emplazó el diputado Raúl Soto (PPD).

Por su parte, el diputado Raúl Leiva aseguró que Ibáñez “expuso innecesariamente al gobierno y el trabajo de la ministra (Jeannette) Jara”.

En esa línea, el parlamentario socialista lamento que su par oficialista se haya dado “un gusto político” y agregó: “Hago un llamado a la reflexión de esto gustos personales en policía, que no van en la dirección de los objetivos estratégicos del gobierno”.

La diputada Camila Musante (Ind-PPD) también expresó sus reparos ante la intervención de Ibáñez y aseguró que “no estamos en un escenario para darnos gustitos de esas características, porque se generó una tensión en el ambiente”.

Pese a esto, Musante matizó su crítica señalando que el diputado “no dijo ninguna mentira y el Partido Demócrata contaba con una minuta donde estaban clarísimos en cómo iban a rechazar en particular la reforma”.