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Opinión

Una Constitución de cara a Chile

Por: Anita Martínez | Publicado: 26.04.2021
Una Constitución de cara a Chile |
Cada una de estas propuestas tiene como sustento el principio de publicidad. Recomendar algo que quiebre este principio y pueda instalar algún tipo de secretismo, más allá de tener o no tener las competencias para hacerlo, traerá como consecuencia un déficit de legitimidad para uno de los procesos más importantes en la historia de Chile. La Convención Constitucional debe ser de cara a la ciudadanía.

El proceso constituyente es un hecho inédito en Chile, nunca antes se había elegido democrática y paritariamente a las personas que redactarían la nueva Constitución. Sin embargo, la legitimidad de este proceso dependerá también de las reglas que rijan su funcionamiento. Son estas normas las que permitirán que el proceso sea efectivamente de cara al pueblo de Chile y las que harán posible que la Constitución que se geste pueda ser realmente nuestra.
Resulta llamativa entonces la propuesta presentada por el Consejo para la Transparencia que, si bien afirma la necesidad de publicidad, lo hace indicando la posibilidad de reserva en algunos casos. Cualquier observación de este órgano para la Convención excede su competencia, ya que este tipo de recomendaciones, de acuerdo con los artículos 32 y 33 de la Ley N° 20.285, solo puede ser efectuada respecto de órganos de administración del Estado o tratándose de recomendaciones al Presidente de la República y Congreso Nacional, y no al naciente órgano constituyente. Esto es relevante porque necesitamos que este pueda darse a sí mismo reglas tales que permitan la participación activa de toda la ciudadanía, y no instar a una hipótesis de reserva que es cuestionable empujar respecto de una decisión tan política (y por ende tan pública) como lo es una Constitución, la carta de navegación de todas y todos. Para ello, será fundamental contar con una Convención Constitucional que actúe en todo momento bajo el principio de publicidad, además de generar mecanismos de participación que hagan probable que la ciudadanía sea protagonista de un proceso que le pertenece.
Dentro de nuestras propuestas se encuentra la creación de un Observatorio Ciudadano, que pueda estar siguiendo y fiscalizando el actuar de las y los constituyentes, problematizando temáticas, etc. Asimismo, contemplar la itinerancia en las sesiones de la Convención que permitan un conocimiento real de Chile y la diversidad de todos sus territorios. También resulta interesante establecer una iniciativa ciudadana de materias que las y los ciudadanos exijan que sean tratadas en la Convención. Cada una de estas propuestas tiene como sustento el principio de publicidad. Recomendar algo que quiebre este principio y pueda instalar algún tipo de secretismo, más allá de tener o no tener las competencias para hacerlo, traerá como consecuencia un déficit de legitimidad para uno de los procesos más importantes en la historia de Chile. ¡La Convención Constitucional debe ser de cara a la ciudadanía!

Anita Martínez
Abogada. Candidata constituyente por el Distrito 15.