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Opinión

La maternidad, un asunto social y político

Por: Karen Espíndola | Publicado: 25.02.2022
La maternidad, un asunto social y político |
La maternidad es un asunto social y político. El Estado es responsable de aplicar políticas públicas que ayuden a las mujeres en estas situaciones y, a su vez, al cambio cultural. Nuestras demandas no están siendo materializadas y es importante que entren en profundidad en el nuevo gobierno, que se aplique toda la estructura del Estado, en poder darle dignidad a las mujeres que crían solas.

Me separé hace dos años y la maternidad me ha tenido alejada de la escritura y de todos mis proyectos. La pandemia, niños pequeños, sin redes y la angustia interminable de esta crisis sanitaria, ha sido trágico. Sin embargo, he tenido que enfrentarme a todos los cuestionamientos que las mujeres vivimos en esta situación. Hasta oir “¡para qué tuviste hijos!”, como si fuera sólo responsabilidad mía.

Profesora, enfermera, psicóloga, cocinera y todo lo que implica criar sola, una carga inmensa que la sociedad nos ha impuesto. ¿Dónde está el rol de los hombres y lo que implica la paternidad? La crianza se torna un rol exclusivo de la mujer como un mandato, todo el peso de una sociedad patriarcal en las mujeres. Sin ir más lejos, hace poco una abogada, en un juicio por pensión de alimentos, me dice bien suelta de cuerpo que por qué no trabajo. Como si el trabajo doméstico y la crianza fueran nada.

La maternidad es un asunto social y político. El Estado es responsable de aplicar políticas públicas que ayuden a las mujeres en estas situaciones y, a su vez, al cambio cultural. Nuestras demandas no están siendo materializadas y es importante que entren en profundidad en el nuevo gobierno, que se aplique toda la estructura del Estado, en poder darle dignidad a las mujeres que crían solas.

Nawal El Saadawi, médica, escritora y feminista, dice: “Se nos ha criado hasta llegar al sacrificio, sacrificio por la familia, por los hijos, por el país. Pero ni el país ni el marido ni los hijos se sacrifican por las mujeres. Aun así, lo toleramos. Tenemos que erradicar esta psicología de la esclavitud”. ¿No es acaso cierto lo que acusa Nawal?

Hoy, en medio de una crisis mundial, las mujeres sienten una soledad profunda. La mayoría de ellas se han empobrecido y su salud mental se debilita. La maternidad no puede darse hoy en un contexto de libertad, porque no existen las condiciones de ello. Lo que implica que las mujeres más vulnerables siguen viviendo en escenarios hostiles. Ningún gobierno, aun con Ministerio de la Mujer, se ha hecho cargo de manera responsable, prolija y comprometida por la vida de nosotras. Un escenario que sólo favorece a perpetuar nuestra opresión y agrandar aún más las brechas de género.

Karen Espíndola