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La asistencia, nuevamente el punto crítico de la educación parvularia

Por: Evelyn Sánchez | Publicado: 31.08.2023
La asistencia, nuevamente el punto crítico de la educación parvularia Imagen referencial – Jardin infantil | Agencia Uno
Se han estudiado la multiplicidad de factores que determinan la baja asistencia a los centros educativos, tales como: barreras económicas, problemas de salud, falta de conciencia sobre la importancia de la educación temprana o incluso desafíos logísticos para las familias. Si bien algunos de estos factores pueden ser difíciles de eliminar por completo, existe un factor cultural en el cual para las familias no resulta relevante enviar a los niños y niñas a estas experiencias educativas, lo cual evidencia el bajo valor a las instituciones educativas por parte de la ciudadanía, lo cual exige el acuerdo político por un pacto educativo de largo plazo.

La educación inicial cuenta con acuerdos transversales respecto a su peso específico y predictor en la generación de oportunidades que permiten abordar las brechas sociales para el desarrollo y aprendizaje de niños y niñas. Es innegable que diferentes políticas han impulsado durante las últimas décadas un espacio de acuerdos en torno a la prioridad en esta etapa del desarrollo y la necesidad de profundizar en aspectos como la calidad, la equidad y el acceso.

En este camino, hacia sociedades justas, humanas y equitativas, no podemos prescindir del rol vigente de la reactivación educativa, conceptualización que llega a la educación inicial, posterior a la pandemia y confluyente a la crisis del sistema educativo completo, ya configurado antes del 2019 según muchos expertos, en cuanto a las altas cifras de deserción, ausentismo y violencia en las escuelas. Hoy las comparaciones recurrentes entre diversos indicadores educativos son: recuperar y mejorar los resultados del 2019; pero esto no es suficiente para avanzar en las brechas sociales y educativas vigentes.

En esta mirada, la asistencia ha sido un tema abordado a lo largo de los últimos años, considerando que ante toda mejora estructural del nivel, no hay impacto relevante sin que niños y niñas asistan a las experiencias educativas en aula. De este modo, emergió un nuevo debate: el ausentismo a nivel de educación parvularia, cuyo relato se ha vuelto prioritario a la hora de estructurar los incentivos en torno a la educación inicial y evidenciar la predisposición del sistema a la exclusión escolar desde este nivel.

En la última Encuesta CASEN 2022, el 42,1% de los niños entre 2 y 4 años no asiste a los niveles medios de educación parvularia y sus padres declaran en una amplia mayoría (79%) que no lo consideran necesario. Ante estas cifras, resulta evidente preguntarnos qué debemos dejar de hacer, modificar o mantener, estableciendo acciones claras para un nivel educativo que no es obligatorio, es decir, estamos ante una búsqueda de voluntades permanente.

Se han estudiado la multiplicidad de factores que determinan la baja asistencia a los centros educativos, tales como: barreras económicas, problemas de salud, falta de conciencia sobre la importancia de la educación temprana o incluso desafíos logísticos para las familias. Si bien algunos de estos factores pueden ser difíciles de eliminar por completo, existe un factor cultural en el cual para las familias no resulta relevante enviar a los niños y niñas a estas experiencias educativas, lo cual evidencia el bajo valor a las instituciones educativas por parte de la ciudadanía, lo cual exige el acuerdo político por un pacto educativo de largo plazo.

En esta multiplicidad de estrategias, desde la Corporación para la Infancia de Santiago estamos trabajando en conjunto con las metodologías de la Fundación Educacional Oportunidad, siendo el primer sostenedor VTF en adherir a este tipo de planes de trabajo, es decir, incorporando los datos, la información y prácticas testeadas para avanzar en un seguimiento individualizado del ausentismo por cada niño/a. Cabe destacar, que recién desde el año 2019, la Junta Nacional de Jardines Infantiles implementó una plataforma de registro en línea de la asistencia Gesparvu Web, aspecto que antes era sistematizado en papel para todos los sostenedores VTF.

Hoy podemos ver que íbamos en la línea correcta, pero poco se soluciona con los datos. Se requiere acompañamiento dirigido a las comunidades educativas, considerando sus características territoriales y de gestión.

Sin embargo, el desafío de la asistencia requiere de todos los actores del sistema, las familias buscan cuidados, pero la transformación educativa hace imperante su activo rol en los aprendizajes y oportunidades para el desarrollo integral de la infancia. En este punto, las campañas comunicacionales son un medio, pero no pueden transformarse en lo único que estamos haciendo como Estado para atenuar el problema.

Se requiere adecuar los instrumentos de gestión educativa, incorporando por ejemplo, acciones concretas contra el ausentismo en los Planes de Mejoramiento Educativo 2024, que será una de las medidas que traerá este trabajo en la red de jardines infantiles y salas cuna de Santiago. Considerar que actualmente en educación inicial estas acciones no tienen financiamiento, como sí sucede en el caso de escuelas y liceos.

Hoy la transformación de la práctica no sólo exige a nuestros equipos educativos, sino al Estado y las comunidades educativas completas, trabajando coordinadamente con los medios disponibles, escasos, pero a la mano, sin excusas.

Evelyn Sánchez
Directora Ejecutiva de la Corporación para la Infancia de Santiago