Beatriz Sánchez: “Tenemos julio para empatar y todo agosto para ganar”

Beatriz Sánchez ha tomado un rol comunicacional protagónico para el Apruebo desde que acabó la Convención. Tanto en el matinal de Canal 13 hace unas semanas, donde cuestionó los privilegios de Juan Sutil, como desmintiendo y aclarando los dichos de Warnken en Estado Nacional, la comunicadora comenzó a alzar su voz en los medios luego de un período donde estuvo mucho más concentrada y abocada a la tarea de escribir el texto que se plebiscitará el 4 de septiembre.

De hecho, esta semana se enfrascó en una discusión con la exministra de Desarrollo Social de Piñera, Karla Rubilar, en el matinal de Mega. Esa vez la conversación nuevamente se basó en las interpretaciones de artículos que hace el Rechazo.

Pero Sánchez ya está cansada de eso, comenta. Para la periodista hay dos puntos de vista para analizar la propuesta de nueva Constitución. «La primera es una perspectiva más global, creo que eso es muy interesante. La Constitución, más que un grupo de normas sueltas tiradas sobre un papel, lo que propone es un camino para que las personas sigan avanzando con seguridades», sostiene.

«Hay una tentación de hablar por norma, y sí, de acuerdo, podemos hablar por norma, pero primero hay que darle la mirada a lo que la Constitución es: un pacto social, político, cultural, en donde todos y todas nos ponemos de acuerdo en cómo queremos que sea el Estado», explica, añadiendo que «los medios de comunicación se están concentrando en dos aspectos de la conversación, cuando la nueva Constitución es mucho más amplia y tiene mucho más en otro lado y no lo estamos discutiendo».

Aparte, la excandidata presidencial reconoce que su opción está en una leve desventaja momentánea, y en ese sentido «sospecha» de la campaña del Rechazo, y no sólo por las noticias falsas que replican y difunden sus vocerías. «Partió antes de que tuviéramos una línea escrita. El mundo del Rechazo está en el Rechazo antes de conocer el texto, o sea, no es que rechacen el texto, lo que rechazan es la forma, que se cambie la Constitución del ’80», aclara, aludiendo a la supuesta intención de la derecha de «reformar» si no se aprueba el texto emanado de la Convención.

Sin embargo, está confiada en que podrán remontar este escenario y que, finalmente, se impondrá el proyecto que redactó junto con sus compañeros y compañeras constituyentes. Les quedan menos de dos meses para dar vuelta el resultado y una esperanzada Beatriz Sánchez enfatiza que lo lograrán, agregando que hay un dato de las encuestas que no se ha difundido mucho: «La mayor parte de las y los encuestados proyectan que Chile va a estar mejor si gana el Apruebo».

Los rostros del Apruebo

– Has participado de varios debates en televisión recientemente. ¿Te sientes uno de los rostros del Apruebo? 

Yo no podría decir eso. Creo que tiene que ver con que la gente me ubicaba más como periodista, después con la candidatura presidencial, entonces, creo que se nota más sólo porque me conocen, no es que sea el rostro.

Pero, lo que hemos estado haciendo es mucho despliegue con convencionales incluso de otros sectores. He estado haciendo harta campaña con Benito Baranda… pero no, no me siento un rostro particular de la campaña.

– Un medio te posicionó como candidata a ser jefa de campaña del Apruebo…

Todavía no hay nombradas vocerías oficiales de la casa del Apruebo, que es el Aprobemos por Chile, que cobija a muchas organizaciones sociales, a grandes sindicatos, y también a los partidos que estamos por el Apruebo. A veces surgen nombres, pero de eso todavía no hay nada, porque la verdad es que voy a estar yendo y viniendo a Santiago, visitando muchas regiones.

– ¿Es un papel que te acomodaría?

Sí, si se da la posibilidad y eso es compatible con todo el despliegue yo no tengo problema. Creo que mientras más gente salga a informar, si eso es bueno, si está bien, hay que darle.

– ¿Cuál es el ánimo que ves en el mundo del Apruebo?

Lo que yo veo es un ánimo de ponerse a trabajar. Lamentablemente, la campaña del Apruebo empezó recién, no podíamos hacerla antes porque no estaba el texto terminado y aquí hay que ser responsables. La única manera de empezar una campaña es con el texto listo, por eso yo sospecho de la campaña del Rechazo, porque partió antes de que tuviéramos una línea escrita.

El mundo del Rechazo está en el Rechazo antes de conocer el texto, o sea, no es que rechacen el texto, lo que rechazan es la forma, que se cambie la Constitución del ’80. En cambio en el Apruebo, tratamos de ser responsables. Vamos en desventaja de tiempo, pero yo veo a todos mis compañeros y compañeras moviéndose, tenemos agenda llena y eso me da mucha esperanza.

– ¿A qué liderazgos te gustaría ver en la campaña?

A mí me gustaría ver rostros que le hablen a distintas poblaciones. Creo que se han sumado académicos súper valiosos como Javier Couso, quien es muy didáctico y ha salido en todos lados. Hay otros liderazgos que me gustan mucho como el de Carlos Gajardo, por ejemplo, en todo lo que tiene que ver con temas de justicia, quizás la parte más árida de la propuesta, y él la explica con peras y manzanas. También está Andrea Repetto, una economista joven y referencial.

Me gusta también gente de Derechos Humanos, como Milton Juica, por ejemplo. Me gustaría que siguiéramos en un camino de figuras que le hablen a públicos distintos.

A siete semanas del Plebiscito

– Prácticamente todas las encuestas están dando por ganador al Rechazo. ¿Cree que cambiará ese escenario? 

Todas las encuestas miran hacia atrás, no hacia adelante. Son encuestas de opinión, no de proyección, están hechas para captar una foto del momento. Quiero retrotraerme a lo que pasó con el Apruebo de entrada, recordemos lo que decían las encuestas y recordemos el resultado final.

El día que vamos a saber lo que la gente efectivamente está pensando y cómo se proyecta es el 4 de septiembre (…) Tenemos julio para empatar y todo agosto para ganar, y hay un dato que no se habla mucho: la mayor parte de las y los encuestados proyectan que Chile va a estar mejor si gana el Apruebo.

– La encuesta Pulso Ciudadano dice que el Rechazo ha estado creciendo en segmentos jóvenes y de sectores populares, que antes eran puntos fuertes del Apruebo. ¿Cree que es así? ¿Por qué se produce esto?

Hoy hay muchas inseguridades, y por supuesto la propuesta de un cambio constitucional puede traer muchas inseguridades si es que no conoces bien lo que dice el texto, lo que se propone. Ha habido mucha tergiversación de lo que dice la Constitución y créeme que ha permeado mucho. A mí me preguntan en muchos conversatorios cuestiones que son derechamente falsas.

Las top tres son que: si las personas van a perder su casa, algo que es absolutamente falso, y se pregunta constantemente; la segunda tiene que ver con la propiedad de los fondos de pensiones, que efectivamente van a ser de cada persona; y lo más importante, hoy el derecho de propiedad es muy robusto y es considerado un derecho fundamental, eso nunca estuvo en disputa. Aclarando esas cosas avanzamos.

– A propósito de los 4/7, la derecha ha encontrado en el Congreso un escenario para desplegar su agenda contra la nueva Constitución. ¿Cree que la centro izquierda debiera abrirse también a pelear en el Congreso y aprovechar este ánimo «reformista» de la derecha o cree que se corren muchos riesgos hacerlo antes del plebiscito?

Creo que deberíamos dejar que la gente se expresara. Hay que dejar que la gente hable primero, si esto tiene un plebiscito, esa es la gracia de este proceso. Durante el proceso constituyente escuchamos a cientos de personas, y miles si consideramos la cantidad de documentos que nos llegaron y las organizaciones con las que hablamos. La propuesta de la nueva Constitución no fue una idea de 154 personas. Hay cientos de horas de audiencias públicas donde tomamos opiniones, hubo un proceso participativo con iniciativas populares de norma, y además, muchas de las normas se elaboraron con organizaciones que hace años trabajan en eso.

Todo esto de adelantar una discusión de lo que pasaría, porque hay personas que quieren siempre tener opinión acerca de lo que pasa en Chile, me parece que no es justo. Dejemos que la gente hable. La gente más furiosa por el Rechazo, o a quienes hemos visto liderando eso, creo que no soportan no tomar las decisiones por el resto.

«Con mucho respeto»

– ¿Qué le pareció la carta del expresidente Lagos?

Al no tomar posición, creo que es más funcional al Rechazo. Le tengo todo el aprecio, en su momento voté por él y creo que fue una persona relevante en la historia del país, pero creo que hoy, y lo digo con mucho respeto, su voz no es relevante.

Los que más han ocupado su carta son la gente del Rechazo y, pese a su opinión, sus partidos votan distinto, el PS y el PPD están comprometidos con el Apruebo. Me quedo mucho con lo que dijo Carolina Tohá, ella es muy allegada a Lagos, pero ella cree que el exPresidente hizo una mala lectura de la actualidad.

– ¿Qué le parece la fuga de figuras de la Concertación hacia el Rechazo?

El eje izquierda-derecha no funciona tanto acá, y no es el único. Hay un eje conservador-progresista y creo que mucha gente de izquierda es muy conservadora. Y también hay un eje entre quienes siempre han tomado las decisiones respecto a quienes no. Mucha de la gente que se supone que es de sectores de izquierda o centro izquierda y que ahora está rechazando, está acostumbrada a una política donde tomaban todas las decisiones para el resto de Chile.

Y no quiero hacer la caricatura pero es que era así: básicamente hombres haciendo política, de izquierda y de derecha, que habían estudiado en los mismos colegios, estudiaron en las mismas universidades y estudiaron tres carreras. Todos igualitos. Y hoy la política y el país son más diversos. Chile se volvió más complejo pero más interesante también.

– ¿Ve la figura de Michelle Bachelet como una figura clave para el Apruebo? ¿Debiera aparecer en la franja?

Yo soy súper fan de la expresidenta, nos abrió la puerta a muchas otras que hoy estamos en política, así que a mí me encantaría que ella estuviera presente y, no sé, si quiere estar en la franja yo creo que sería bueno también. Es una figura muy potente en Chile, y siempre trató de pelear por las desigualdades.

«Una cobertura interesada»

– ¿Qué le parece la cobertura que los medios nacionales han hecho sobre la Convención, el texto constitucional y ahora sobre el Plebiscito?

Creo que ha sido una cobertura interesada. No podemos negar que Chile tiene los medios de comunicación más concentrados de América Latina. La tele y los grandes diarios son propiedad de grandes grupos económicos que tienen otros intereses. Tienen bancos, tienen propiedad minera, inmobiliaria, energética, forestal, pesquera, y la Constitución promueve cambios en ese sentido, promueve cambios para las personas.

No así los periodistas que cubrieron la Convención, porque yo conversaba a diario con ellos y tenían la misma pega que nosotros y estaban muy enterados, pero los titulares, sobre todo los de portada, en los distintos medios han sido contrarios a la nueva Constitución. Además, han ido concentrando la conversación en cuestiones que no son lo principal ni lo que más le importa a la gente. Se han quedado en los detalles y no han mirado el texto completo.

– ¿Le parece que hay medios que ayudan a difundir fake news en vez de desmentirlas?

Sí, creo que hay medios que se han prestado para que esas noticias falsas o tergiversaciones estén muy presentes, incluso en horario prime. Y no todos los que tienen pantalla o páginas en los diarios están atentos a decir «eso es falso», «eso es una tergiversación», hay algunos que lo hacen y es súper duro ese momento, pero yo esperaría que todos y todas dijeran: «oye eso es falso».

Yo no quiero decir que hay intencionalidad, pero el entrevistador o entrevistadora a cargo no sólo cumple el rol de que no hablen todos al mismo tiempo, sino que tiene que establecer las condiciones del debate y que sea un debate justo, que se hable la verdad y lo que realmente contiene el texto. Creo que el evitar entrar en polémicas hace que muchos se callen. Hoy hay mucha exposición pública, sobre todo en temas que despiertan muchas pasiones, pero una agradece cuando hay periodistas que cumplen su rol.

– ¿Cuál fue la última “frase apocalíptica” sobre la nueva Constitución que ha leído? 

Más que leerla, una vez escuché en la tele algo absolutamente falso y «apocalíptico», y era que los narcotraficantes iban a poder ser candidatos y llegar a ejercer cargos de elección popular. Eso se lo escuché a un abogado en un programa de la tele, y no puedo creer que esas cosas pasen. Y el periodista se reía. Impactante.

Y lo que más escucho en conversaciones con grupos de personas es el tema de la propiedad de las casas, que si es verdad que van a perder su segunda propiedad, o si es verdad que no van a poder heredar las casas, que ya no van a ser nunca propietarios. Y quiero decirlo con todas sus letras: eso es falso, totalmente. No sé si hay alguna Constitución en el mundo que pudiera decir «le vamos a quitar las casas a la gente», es algo sin sentido.

– ¿Cree que esta ola de fake news puede hacer que no gane el Apruebo?

Yo diría que no, que no estamos aún en ese lugar, y ¿sabes por qué no? Porque la derecha y los sectores más conservadores, los mismos que están en el Rechazo hoy y que se han negado a todos los cambios en Chile, siempre han jugado a la tecla del temor y de inocular miedo. Siempre se juega con que va a quedar la escoba, y siempre hemos logrado salir adelante porque la gente no es tonta, la gente se da cuenta de que hay cosas que no cierran.

Basta de inocular temor para que logremos los cambios en Chile, si son cambios que todos queremos. La gente no es tonta para no darse cuenta cuando tratan de engañarla una y otra vez con los mismos temores.