Mapa de las elecciones en un PPD que lucha por mantenerse a flote

Pasados sólo un par de meses desde su estrepitoso fracaso en las elecciones de Consejeros Constitucionales del 7 de mayo, el Partido por la Democracia (PPD) aún enfrenta un complejo panorama, que se expresa en el peso e importancia relativa que tiene en cuanto conglomerado, yendo más allá de muy contadas individualidades, tanto en su coalición como dentro del gobierno. Por esta razón, las elecciones internas del 27 de agosto se alzan como las más importantes en mucho tiempo para la colectividad. 

Actualmente, el PPD está siendo comandado por Natalia Piergentili en calidad de presidenta, y José Toro como secretario general. Desde su llegada, en el 2021, el partido ha visto bastante disminuida su relevancia dentro del escenario político debido, fundamentalmente, a los malos resultados electorales que han tenido en las últimas elecciones de forma sucesiva. 

En el periodo legislativo pasado, el PPD tenía seis escaños en la Cámara de Diputados y Diputadas, cantidad que disminuyó a la mitad para la actual composición del Congreso. En adición, los independientes con cupo del partido han puesto en jaque votaciones claves en proyectos impulsados por el Ejecutivo en diversas ocasiones, otra muestra de fragilidad al interior de la tienda.

A esto se suma que en la Convención Constitucional sólo tuvieron cuatro representantes, mientras que en los últimos comicios, luego de una gran polémica tras decidir ir en una lista separada del Partido Socialista (PS), confirmaron su debacle al no alcanzar ningún cupo para el Consejo Constitucional. 

Asimismo su relación con el gobierno, específicamente con Apruebo Dignidad (AD), ha sido bastante compleja, lo que incluye múltiples declaraciones cruzadas, las que han tensionado las relaciones entre las partes y, de paso, han perjudicado la imagen de ambas coaliciones de gobierno. 

Los cuatro elegidos 

Con el escenario actual, los militantes del PPD parecieran tener cierta claridad respecto de que necesitan un cambio en la dirección para poder enmendar el rumbo y no quedar condenados a la irrelevancia. Y en esa línea, ya están definidos los nombres que competirán por quedarse la presidencia del partido. No obstante, aún falta que se pongan de acuerdo para determinar a qué fórmula apelarán para no presentar cuatro listas. 

La primera en dejar claras sus intenciones fue la senadora Loreto Carvajal, quien anunció por medio de su Twitter que está disponible para convertirse en la presidenta del partido. Carvajal es militante histórica del PPD y su figura es bien valorada por la militancia, por lo que tendría una gran base de apoyo si llega a encabezar una lista. 

También tendría una buena reputación al interior de las coaliciones de gobierno, en especial en AD, luego de levantar la voz en favor de que el candidato a Fiscal Nacional que eligiera el gobierno fuera una mujer. Otro factor que tiene a su haber, es el rol que ejerce dentro de la bancada de senadores, siendo una de las piezas claves en el esquema actual. Fuentes al interior de la colectividad aseguran que tenerla a ella de timonel, mejoraría la relación con los demás partidos. 

Un nombre que se sumó hace poco es el del senador Jaime Quintana, quien ya fue presidente del PPD entre 2012 y 2016. Es uno de los pesos pesados dentro del partido y, además, dispone del apoyo de la vieja guardia de la colectividad, con cuyos integrantes tiene una estrecha relación. Además, Quintana tiene a su favor el respaldo de la ministra del Interior, Carolina Tohá, quien abogó personalmente para que el parlamentario pueda llegar a ser presidente del partido. 

No obstante, puso un par de condiciones antes que su nombre llegue a una papeleta. Primero, quiere una lista de consenso, a lo que se suma su deseo de que su compañero de fórmula sea el presidente de la juventud PPD, Cristóbal Barra. Esto, dado que su diagnóstico es que la colectividad tiene que construir figuras nuevas y no quedarse solo con los viejos estandartes. 

En un lugar más rezagado aparece Natalia Piergentili, quien aún está en duda respecto de si se presentará o no a la reelección. Su recorrido a cargo del partido ha estado en tela de juicio, a pesar de ser respaldada por la figura más importante de la colectividad, el exsenador Guido Girardi. 

En su contra están los malos resultados electorales y su compleja relación con los partidos de AD, lo que se agudizó luego de sus declaraciones en una entrevista donde trató a un sector del gobierno como “monos peludos”, y sobre todo sus diferencias con Carolina Tohá, con quien tiene una relación muy distante. 

Lo anterior quedó demostrado hace pocos días, cuando la secretaria de Estado realizó un encuentro en su casa con algunos dirigentes y parlamentarios oficialistas para hablar sobre el momento político que están atravesando, además de insistir en el llamado a la unidad. Entre los que llegaron a la casa de Tohá se encontraban los senadores Jaime Quintana y Ricardo Lagos Weber, pero Piergentili no fue invitada.

Por último, la carta sorpresa es la del diputado Raúl Soto, quien a pesar de no llevar muchos años militando en el PPD, ha sabido abrirse espacios. En primera instancia, uno de sus mayores respaldos sería su periodo como presidente de la Cámara de Diputados, que fue bien valorado en la interna, a lo que se suma que es visto como un rostro nuevo que puede darle la frescura que necesita al PPD, comentan fuentes en la interna. 

No obstante, su situación es algo compleja. Ello Soto llegó a la colectividad desde la Democracia Cristiana (DC), un historial que lo deja en desventaja frente a los sectores más duros del partido, desde donde no lo ven como alguien de total confianza para ellos. A pesar de ello, la figura de Soto es vista como una posible salida si no prospera la idea de presentar una lista de unidad.

La publicación de las candidaturas, aceptadas y rechazadas, será el 4 de agosto.

El poder de Guido 

Toda esta situación está siendo vigilada de cerca por Guido Girardi, quien luego de terminar su periodo como senador ha mantenido un bajo perfil, aunque sin perder su influencia en el PPD. Esto quedó demostrado la noche del martes, cuando citó a una reunión en su casa, en la comuna de Vitacura, a la que asistieron las principales figuras del PPD para discutir la situación de las elecciones. 

Al encuentro acudieron Natalia Piergentili, José Toro Kemp, los vicepresidentes Marco Antonio Núñez, Jorge Insunza y Gonzalo Pinto, además de los senadores Loreto Carvajal, Ricardo Lagos Weber y Jaime Quintana; el diputado Raúl Soto y los exministros Sergio Bitar y Francisco Vidal, entre otros. 

La idea era dejar zanjados los nombres para una lista unitaria para los comicios de agosto. Sin embargo, los participantes de la reunión comentan que no pudieron llegar a una definición.

Además de las elecciones, Girardi aprovechó de tocar uno de los temas que más ha intentado impulsar en los últimos meses: consolidar una federación de partidos con el PPD, el Partido Socialista (PS), la Democracia Cristiana (DC) y el Partido Radical (PR). 

Hace un par de meses, el referente del PPD comentaba que “el Socialismo Democrático es fundamental para Chile. Debe existir una fuerza política reflexiva que ofrezca futuro y que, además, tenga la capacidad de ayudar a gobernar bien”. 

A su juicio, su rol pasa por “cambiar la narrativa y generar un espacio de consenso respecto a los temas esenciales del futuro. Eso no lo va a hacer el Partido Comunista (PC)”, recalcó.

Esta moción ha tomado bastante fuerza, incluso en grupos distanciados del Girardismo, por ende se perfila como una solución posible a la compleja situación que atraviesa el PPD. Desde la interna de la colectividad comentan a El Desconcierto que el rol del exsenador en las tratativas será decisivo, porque “él es quien mueve los hilos del PPD, por eso su definición será la clave”. 

De momento, las conversaciones continuarán en la casa de Girardi este domingo a las 19:00 hrs, donde se espera que se defina cuál será la estrategia que seguirá el PPD para definir a su próxima mesa directiva.