Todo comenzó con un tuit que compartió Shuhada’ Davitt, el nombre convertida al islam de Sinéad O’Connor, en el que criticó duramente a las «personas blancas», lo que le valió decenas de respuestas en la que la calificaban de racista. Sin embargo, ella no se alejó de la polémica y en su habitual estilo siguió exponiendo lo que quería decir.
«Lo lamento muchísimo. Lo que voy a decir es algo tan racista que nunca pensé que mi alma pudiera sentirlo. Pero, en verdad, nunca más quiero volver a pasar tiempo con los blancos (si así se llama a los no musulmanes). Ni por un momento, por ninguna razón. Son desagradables», escribió la intérprete de «Nothing compares 2 U».
Ante esto, diversos usuarios de Twitter cuestionaron sus dichos y le respondieron que efectivamente lo que decía era un comentario racista.
Ante esto, la cantante comenzó a recoger estas criticas y reflexionó en torno a ellas. «Interesante de ver que si Twitter banea (elimina) este comentario permite que personas como Trump y Milbank escupan basura satánica incluso contra mi país«, contestó.
Junto a lo anterior, agregó que «todos hablan de que los pobres americanos son las víctimas de Trump, pero ustedes lo contrataron, entonces despídanlo. De otra manera son cómplices».