«Juntas Somos Poderosas», el libro que reúne 40 relatos de mujeres sobre el movimiento feminista

“Tengo situado en mi mente el primer acto feminista de mi vida. Fue una vez que veníamos del supermercado con mis papás, tenía ocho años. Mi padre venía con algunas bolsas, mi madre y yo también, pero mi hermano no llevaba ni una. Ahí pensé: ‘Aquí no hay igualdad’ y dejé las compras en el suelo. Dije: ‘Todos llevamos las bolsas o nadie las lleva’. Mis papás siempre dicen que ese fue el momento de mi primera protesta. Tuve un papá bien tradicional, más bien machista. Creo que descubrí que era feminista un poco por oposición a su forma de crianza. Él siempre me impulsó a hacer lo que yo quisiera, pero con un fuerte tinte machista, probablemente proveniente de la cultura china en la que generalmente todo lo que es el cuidado del hogar está muy entregado a las mujeres y el poder gira en torno a los hombres”.

Ximena Chong, jefa de la Unidad de Alta Complejidad de la Fiscalía Centro Norte, comienza así su intervención en “Juntas Somos Poderosas” (Uqbar, 2019), un libro que reúne 40 relatos de mujeres sobre el movimiento feminista, los que están hechos en primera persona y son una mirada más íntima sobre el feminismo de las chilenas, desde perspectivas diferentes.

Se trata de un libro que fue escrito por alumnos y alumnas de Periodismo de la Universidad del Desarrollo (UDD), y editado por la docente Daniela Mohor, que será presentado este jueves, a las 19 horas, en el Museo de Artes Visuales (MAVI).

Hay relatos de Teresa Valdés, Delia Vergara, Kena Lorenzini y Claudia Dides, quienes vivieron una era del feminismo muy distinta a la de la “cuarta ola”. Pero también están las voces de las universitarias de hoy, como Sofía Brito, Valentina Henríquez, Natichuleta y Josefa Araos; y de profesionales, como Ximena Chong, Esperanza Cueto, la diputada Karin Luck, y las escritoras Arelis Uribe y Claudia Apablaza.

A continuación, una selección de citas de “Juntas Somos Poderosas”:

“Si veo que hay una lista de treinta hombres como presentadores en una conferencia me da rabia”.

Riva Quiroga, lingüista, cofundadora de las comunidades de programación rladies Santiago y rladies Valparaíso, 37 años.

“Nunca dimensioné lo machista que era mi casa hasta que me hice adulta. Todo era a favor de los hombres ahí, quizás, sin querer serlo: ellos podían tener el plato de comida más grande, podían elegir su ropa —ya que eran dos y nosotras seis—, alojar en las casas de sus amigos los días de semana, salir hasta la hora que quisieran y cuando quisieran. Ellos eran libres de organizar su vida a gusto. ¿Nosotras? Teníamos que servir la mesa, retirarla, no podíamos elegir nuestra ropa, no podíamos quedarnos a dormir afuera en la semana y podíamos salir solo hasta las siete de la tarde los fines de semana”.

Kena Lorenzini, psicóloga, fotógrafa, activista, 59 años.

“Ahora uno no puede decir nada porque te suben y te bajan, te pueden meter preso. Y dije como wow, este movimiento del feminismo es tan potente que ha traspasado fronteras. Está todo mucho más abierto. En Chile, hoy es un tema que cruza y que es transversal a todas las clases sociales, a todas las generaciones. Ahora las abuelas también son feministas”.

Claudia Apablaza, escritora, 40 años.

“Las mujeres viven en desventaja, porque criamos a los niñas y niños de manera diferenciada, estereotipada, y eso se da tanto en la familia como en la escuela”.

“Yo fui feminista antes de saber lo que era el feminismo. Vas adquiriendo conciencia sobre el machismo y cuando te pones alerta, lo puedes observar claramente. Es ese sexismo que está naturalizado, ese ninguneo en distintos espacios, en lo social, político y laboral”.

“Debemos poder transmitirles a las niñas de nuestro país que pueden soñar sin límites y que no deben permitir que nadie les diga que por ser mujeres tienen limitaciones o barreras”.

Esperanza Cueto, abogada, fundadora de ComunidadMujer y presidenta de Fundación Colunga, 52 años.

“El día que no celebremos el Día de la Mujer va a ser realmente el día de la igualdad, porque no vamos a necesitar que nos celebren o exista un día especial”.

Karin Luck, relacionadora pública y diputada RN, 47 años.

“Actualmente, las mujeres piensan 3,6 horas al día sobre su cuerpo, mientras que los hombres solo 1,8 horas”.

Dayana Gallardo, abogada, coordinadora general de “La rebelión del cuerpo”, 33 años.

“Lo que nos corresponde a las feministas es hacer espacio para las mujeres, pero también para los hombres porque yo no quiero vivir en una sociedad solo de las mujeres. Quiero una transfor- mación cultural, eso significa que los roles tanto de hombres como de mujeres deben cambiar, porque creo que ninguno de los dos roles —ni la feminidad hegemónica ni la masculinidad hegemónica— está haciendo feliz a las personas”.

Carolina Franch, antropóloga de la Universidad de Chile y Magíster en Estudios de Género y Cultura, 39 años.

“Fue difícil para él, es difícil para los hombres que sus mu- jeres sobresalgan. Mi matrimonio se fue a las pailas. No me he vuelto a casar nunca, he tenido parejas puertas afuera. Esa es una fórmula aconsejable para las mujeres como yo”.

“El feminismo va y viene en olas, pero es la única revolución que no se ha detenido nunca porque de verdad la sociedad y la pareja tienen que cambiar”.

“Esta nueva identidad femenina, la mujer creativa, igual, equivalente al hombre va apareciendo con fuerza en el siglo 21. Ha sido un proceso lento porque requiere un cambio interior en las mujeres y en los hombres. Eso será lo que finalmente va a producir el cambio social”.

Delia Vergara, periodista, primera directora y cofundadora de revista Paula, 75 años.