Rutina de siesta reparadora en habitación sin ruido combate hiperactividad en niños

Dormir es parte fundamental para todas las personas, especialmente los niños hasta los 6 años, ya que están en pleno desarrollo cognitivo. En estas fiestas, sabemos que querrás disfrutar en grande y poner la música a todo volumen, pero si tienes niños en casa te recomendamos tomar precauciones para no interferir en su rutina de sueño, ya que dormir es muy importante para el desarrollo de los más pequeños.

El sueño infantil cumple una función reguladora y reparadora del organismo. Gracias a esto, los bebés y niños pueden recuperarse de episodios de hiperactividad y liberan ciertas hormonas que ayudan al bebé a crecer y a tener un neurodesarrollo adecuado para su edad. También influye en el desarrollo del sistema nervioso central.

Consecuencias del mal sueño

El sueño en los primeros años de edad es tan importante como la lactancia. Si no se cumple, puede afectar al desarrollo del sistema nervioso central.

Esto no solo perjudicaría el aprendizaje durante la enseñanza básica, sino que está comprobado que el niño podría experimentar dificultades de habla y en casos extremos, problemas para moverse, tragar, respirar o aprender.

De igual manera, según dichos de la asesora de sueño infantil, Consuelo Tello, «siempre hay días en que nos saldremos de las rutinas con el sueño, pero no pasa nada. Lo importante es que luego este orden se retome”.

De igual manera, se recomienda que todos los días estés atento a las señales de cansancio del niño para que no adapte un hábito de insomnio que pueda perjudicarlo en el futuro.

Consejos para una rutina

Lo primero es que cada menor tiene una rutina acorde a su edad. Por lo tanto, si vas a pasar las fiestas fuera de casa, asegúrate antes de salir tenga una buena siesta ya sea en la cuna o en tus brazos. De esta forma, las señales de cansancio disminuirán.

También debes estar atento a sus acciones, ¿no tiene ganas de jugar? ¿bosteza continuamente? ¿se frota los ojos? Significa que ya es hora de una siesta. Encuentra un buen lugar para que tu pequeño descanse. Una siesta de 30 a 40 minutos bastará para que retome enrgías.

Por último, es muy importante que encuentres el ambiente de sueño adecuado, sobre todo si estás en plena fiesta de Año Nuevo y tienes la música a todo volumen.

Dos sillas en el comedor no son un buen lugar para que tu hijo duerma, a si que consigue una habitación vacía y aislada del ruido para que pueda descansar.

Para mejorar sus condiciones de sueño, asegúrate que la temperatura sea adecuada, lleva un ruido blanco con tu celular y apaga la luz.

Sueño según edad

Durante el primer año, los primeros tres meses debe dormir de 16 a 17 horas. Nueve durante la noche y el resto durante el día. Desde los cuatro meses se reduce a 15 horas y al año de 13 a 14 horas. Son 11 durante la noche y el resto en el día.

Si tiene de uno a tres años, debe dormir entre 10 y 13 horas al día. La mayoría de los niños abandonan la siesta a partir de los dos años. Por otro lado, si tiene de cuatro a cinco años, debe dormir de 10 a 12 horas por la noche.

Por último, a partir de los seis años van disminuyendo las horas. De seis a ocho deben dormir de 11 a 12 horas en la noche, y con diez a doce deben dormir 10 horas. Desde los trece años ya pueden dormir como un adolescente o adulto normal que necesita unas 8 o 10 horas de descanso nocturno.