Como Asesinar a Felipes reedita su disco “Un Disparo al Centro” y nos cuentan detalles inéditos, canción por canción

Desde que Como Asesinar a Felipes irrumpió en la escena nacional, a fines de los 2000, llamaron la atención y rápidamente se transformaron en una revelación gracias a su refrescante e híbrida propuesta, que hacía dialogar orgánicamente al jazz con el rap, dos mundos que, pese al prejuicio, tienen más puntos en común que elementos diferenciadores.

Al tándem batería/bajo –con Felipe Salas y Sebastián Muñoz– que marcan la columna rítmica bajo los estándares del jazz rock, se suma un teclado armónico de Marcos Meza, que sirve de puente para la aparición de Koala, el maestro de ceremonias, quien va rapeando versos esdrújulos, apoyado por scratches y samples desde las tornamesas de DJ Sp@cio. Luego de su debut homónimo, todos quienes quedaron embrujados por esta sonoridad, esperaban ansiosos lo que la banda preparaba para su sucesor. Y la sorpresa fue mayúscula.

“Nosotros no nos damos cuenta de lo desprejuiciados que somos al mezclar cosas”, contó Felipe Metraca Salas en una entrevista. Y detalla: “Para la época del Un Disparo al Centro, con el Marcos fuimos a ver mucha música clásica y dijimos «¿por qué no hacer un disco con una orquesta?»”. Comenzaba así la idea de este disco “más cabezón”, como llama Koala a este LP de siete canciones y 22 minutos de duración, que contó con la participación de 15 músicos de la Orquesta Nacional Juvenil. “Cada vez que lo tocábamos en vivo era mucha información y la gente quedaba como abrumada”, recuerda Felipe, a la vez que nos cuenta que solo se ha tocado una vez con orquesta completa, cuando grabaron el DVD Operación Teatro Oriente en octubre de 2009.

El baterista también nos cuenta algunos detalles por ahora inéditos del disco. Grabado en solo dos días (el 15 y 16 de octubre de 2008) y masterizado por Carlos Barros, quien también estuvo a cargo de la remasterización de la nueva edición, Un Disparo al Centro contó con la colaboración del hoy astro del pop nacional Alex Anwandter, quien interpretó uno de los violines que suenan en el álbum. Este trabajo, además, fue el que enviaron a Billy Gould, llamando la atención del líder de Faith No More y dueño de Koolarrow Records, sello que desde el 2012 –con su cuarto disco Comenzará de Nuevo– será su casa discográfica internacional (apoyados siempre desde el importante cubil local Potoco Discos).

«Esta obra representa uno de los puntos cruciales en mi carrera. No desde un aspecto técnico, sino más bien por lo que este proceso despertó en mí y los horizontes inimaginables que se abrieron posterior a este trabajo a nivel creativo”, se sincera Marcos Meza, pianista que hoy reside en Berlin, Alemania. “Doy gracias a CAF por permitirme vivir esa experiencia reveladora», se expresa con cariño hacia sus ex compañeros de banda.

De la mano de su remasterización, esta edición por el décimo aniversario también cuenta con un nuevo arte, de la mano del sexto CAF Ariel Altamirano (autor de todas las portadas), quien no había realizado el diseño original del 2009 (a cargo de Sebastián González). Una década después, se salda la deuda.

Sin más, Felipe Metraca (FM), Marcos Meza (MM) y Koala Contreras (KC) realizan la radiografía de Un Disparo al Centro, canción por canción, en exclusiva para Babel:

De principio a fin

Felipe Metraca: La apertura del disco, un collage de samples a cargo de Dj Sp@cio, con las instrucciones para oír el álbum.

Nos reúne el propósito

FM: Es la presentación de la orquesta que acompañará todas las canciones del disco con arreglos de Marcos Meza. Queríamos que el beat fuera mecanizado y lo interpretó Foex en la MPC2000. Aquí comenzamos a unificar nuestros discos relacionando la última canción de uno con la primera del otro, en este caso este tema parte con la última nota que suena en nuestro álbum homónimo, además se escucha la melodía de ‘En el jardín’. Al ser un disco conceptual, esta canción está ligada con la última, ‘Nuevo día para comenzar’.

La puerta no se abre sola

MM: La compuse inspirado en en las melodías circenses del folclor ruso. Este tema se empieza a desarrollar, como siempre, de manera orgánica en la sala de ensayo. Koala hace su aparición por primera vez en el disco. Luego, el tema comienza a desarrollarse y organizar entre secciones instrumentales y vocales. Con interludios que dan pausa al relato intervenidas por locuciones y los paisajes sonoros de Dj Sp@cio. El rap se pone al servicio de la música clásica, respetando los espacios y los detalles que la orquesta debe cubrir. El instrumento solista que conduce el tema es el corno francés, aquel que llama a sus compañeros de metal en la parte C para expresar con cólera su sonido, acompañados por el rock elegante de SebaBala.
FM: Una de las mejores canciones que hemos hecho. Para mí es completamente única, una cadencia hipnótica que de la calma se transforma en tormenta para acompañar un gran texto de Koala.
KC: Entender que la voluntad tiene mucha importancia a la hora de escoger nuestro camino en la vida, y que no hay víctima sin victimario, que realmente todos tenemos el derecho a decidir con respecto a nuestro destino y cuerpo (o por lo menos así debiera ser), que ninguno es tan bueno ni puro como cree ser, que así como unos quieren avanzar otros quieren retroceder, valorando el esfuerzo al extremo para lograr lo que uno se ha propuesto, para sentirse útil o un aporte individual o para su entorno sin caer en la vanidad mostrando el camino optado como una alternativa a seguir, escribiendo lo que se ve y reflexionando, filosofando para continuar, más la música que me tocó escuchar, fue la plataforma ideal.

Un disparo al centro

MM: Es el tema ¨rockero¨ del disco. Compuesto por Felipe, la canción comienza a desarrollar su identidad experimental basado en la métrica irregular de cinco octavos que a Koala Contreras le parecían perfectas para calzar su rima ácida. SebaBala va al unísono con el beat progresivo de Felipe Metraca. DJ Sp@cio se encarga de resaltar la identidad clásica con un canto lírico sampleado que se suma en los coros haciendo de doble voz al grito desenfrenado ‘Un disparo al centro’.
FM: En los inicios de la banda, la inspiración fue el jazz modal que se vio reflejado en nuestro álbum debut. Al año siguiente, nuestra búsqueda nos llevó a la música clásica, en especial al impresionismo, asistiendo sagradamente a ver orquestas sinfónicas y estudiar a sus compositores.
KC: 2002 en adelante es una etapa de cuestionamientos importantes, marcando el estilo y  el camino en la expresión vocal y la forma de escribir hasta hoy. El estribillo de este tema “…ahora tengo un nuevo sueño, bajo tranquilo, decidido y en silencio… apuñalo al insomnio, degollo al pesimismo y disparo al centro…”, fue escrito en el invierno del año 2005, antes de que CAF empezara su historia. Sin saberlo, es el origen de Simón Temato, el asesino lírico  imaginario que sirvió para el pie de la canción que de alguna manera nos muestra la búsqueda personal del existir por un propósito y no ser un instrumento más para el orden establecido. Esa cuota de esperanza tan necesaria para seguir creciendo y creando con ese desencanto rabioso por la desigualdad, la tiranía y la falta de amor, reconociendo la maldad interna y las ganas de cambio como idea personal para afectar en lo social y colectivo.

Nunca será lo mismo

MM: Este tema instrumental viaja al jazz de los 60. Personalmente es uno de mis temas favoritos de CAF y de todos los temas que he compuesto alguna vez. La armonía modal y bloques armónicos paralelos dan una atmósfera sostenida en el tiempo, un viaje por las sonoridades americanas de Charles Mingus, Gil Evans y Burt Bacharach. Para mí, la orquestación que elegimos para este tema fue el mayor acierto, principalmente las tres trompetas que entran en el segundo coro.
FM: El descanso después de la tensión, el regreso al jazz modal del primer disco. Años después compondríamos la respuesta a este tema: ‘Siempre será lo mismo’. del disco Comenzará de Nuevo.

Cuando la verdad no encaja

MM: Esta canción, de alguna manera me lleva a la psicodelia de Cypress Hill. Los acordes son una mezcla entre Los Beatles y Erik Satie, que quizás por esos años nos influenciaron bastante. Para mí, también representa uno de los mejores temas del disco por su elegancia y oscuridad. El beat de Felipe es uno de los más cool que he escuchado. SebaBala sorprende con su simpleza y buen gusto para acompañar la rítmica y definir las armonías que se desarrollan hacia la parte C. Un regalo a los oídos. Esta canción fue abordada solo con orquesta de cuerdas, lo que da una identidad especial a este tema dentro del disco.
KC: Los versos cada vez mas necesarios eran para la expresión emocional, representando luz en la obscura rutina y conformidad, un primer llamado a vivir menos mecanizado y uniformado, no dejarse hipnotizar por el brillo de lo fácil y bonito o del marketing y el spot mentiroso. La búsqueda de una verdad no impuesta ni obligada entendiendo los límites, entendiendo que soy tan responsable como el resto y que la mentira siempre se hace presente disfrazada o a cara descubierta.

Nuevo día para comenzar

MM: Es la coda del disco. Es básicamente el tema ‘Nos reúne el propósito’ pero desarrollado. Bajo la misma lógica que la apertura, los instrumentos entran gradualmente para alcanzar el clímax junto a la melodía que interpreta el Rhodes. Melodía que será, a su vez, la introducción del tercer disco Colores y Cadáveres.
FM: El gran final. El cierre perfecto para el disco, la despedida de la orquesta con una hermosa melodía compuesta por Marcos Meza, a lo que Dj Sp@cio le sumó un sample muy emocionante que expresa de manera perfecta el sentir de nuestra música.