Elisa Loncon lanza “Azmapu”: “Por primera vez se presenta un libro de filosofía mapuche”

A través de 120 páginas, la académica mapuche Elisa Loncon despliega un sistema de pensamiento integrador del pueblo mapuche, fundamentado en la armonía de la Tierra, sus ciclos y la diversidad de sus habitantes.

Se trata de Azmapu. Aportes de la filosofía mapuche para el cuidado del lof y la madre tierra, la nueva publicación de la lingüista e investigadora que presidió el primer periodo de la Convención Constitucional.

«Por primera vez se presenta un libro de filosofía mapuche, este es mi grano de arena para una nueva convivencia desde el conocimiento«, expresó.

Loncon destacó que escribir sobre el azmapu -filosofía mapuche- responde a «un tiempo en que los pueblos hablemos por nosotros mismos, y empecemos a contar las otras historias, las de nuestros pueblos, las que se resisten a desaparecer».

A través de un libro sencillo y clarificador, la lingüista invita a los lectores a comprender cuáles son los pilares fundamentales de la filosofía mapuche, y a pensar en las posibilidades que otorga un modo de vida basado en el respeto por el entorno y el valor del bien común.

«Aportar al cambio»

La publicación también aborda la estrecha relación entre la lengua y la cultura mapuche. «El mapuzugun es la posibilidad que tenemos el pueblo mapuche para recuperar toda nuestra filosofía que ha sido suprimida y despojada por el colonialismo cultural», relevó.

En palabras de Loncon, el texto busca «aportar al cambio, para aportar a la reflexión con otras miradas» y ayudar a la creación de una «nueva cultura ampliada a diversas miradas».

Sobre todo, ante la necesidad de practicar una forma de vida donde el equilibro entre las personas y la naturaleza sea primordial, según su autora.

Este «buen vivir» o kümen mogen supone, de acuerdo con la académica, «una nueva ontología, donde no solo existimos los seres humanos como ente único, sino también los otros seres de la tierra, con los que coexistimos e interdependemos».

«No se trata solo proteger al ser humano, sino proteger su entorno territorial, el agua, la montaña y otros seres que coexisten con nosotros. La explotación de la naturaleza no cesa debido a que no está instalado en la cultura occidental el valor y respeto por la naturaleza y ¡qué dura es la avaricia humana para no reconocer ni comprender este valor!», y añade:

«El küme mogen también implica tener una sana convivencia, sin mentiras, sin violencias, ni discriminación ni racismo (…). Hacer el bien nos conduce a la armonía»

Portada de «Azmapu», de Elisa Loncon.