Weichafe y sus polémicos mensajes en Lollapalooza: «Don Francisco mató la mente reflexiva de la gente»

Sentado en un bar del centro de Santiago, Ángelo Pierattini muestra riendo su celular. Tiene abierto una noticia del portal Emol que hablaba de los mensajes políticos de su banda en el último Lollapalooza. Entre los tantos «lacra comunista» que se lee en los comentarios aparece uno en particular: «Es un músico y compositor chileno, vocalista y guitarrista de la banda de chilena de rock Weichafe. En resumen es un operador político del gobierno».

Ha pasado una semana desde la exitosa presentación del trío rockero en el Lollapalooza. Para las miles de personas que saltaron al son de sus canciones e hicieron el clásico mosh en medio del público, no pasaron desapercibidos los mensajes con que la banda acompañó su música. «Aborto legal ya. Hipócritas!», «Wallmapu libre», «el agua es un derecho», aparecían en carteles. Al final, una secuencia de imágenes que iba desde Sebastián Piñera, Ricardo Lagos, Ricardo Ezatti, Ena Von Baer, Jacqueline Van Rysselberghe, Andrónico Luksic, Kike Morandé y Don Francisco, entre otros. Todos, personificados como el «diablo».

Fundada en 1996, la banda de Pierattini (voz y guitarras), Marcelo Da Venezia (bajo y segundas voces) y Roberto «Flako» Ugarte (batería) pasa por uno de sus mejores momentos. No solo se robaron el show en Lollapalooza con lo que fue definido como una de las mejores presentaciones del día sábado, sino que sobrevivieron a cinco años separados como banda entre 2009 y 2014. Y lo hicieron de la mejor forma: Regresando a los escenarios con Mundo Hostil, uno de los mejores discos de la escena chilena en 2016 -producido por Paco Ayala de Molotov y con la colaboración de Ricardo Mollo de Divididos- y con la decisión de arraigarse en México desde medidos de este año.

En entrevista con El Desconcierto, Pierattini repasa lo que fue el show del Lollapalooza, el futuro de la banda y comenta ampliamente, sin tapujo alguno, la coyuntura nacional. Estas son las definiciones políticas de un weichafe.

/ Agencia Uno

– ¿Cómo se tomaron el recibimiento de la gente en Lollapalooza?
– Fue una recepción sorpresiva para nosotros, porque es un público distinto al que estamos acostumbrados a tocar. Lo bueno del verano fue que todos los shows que hicimos tenían que ver con un publico distinto, en Isla de Maipo, La Serena, Concepción, eventos masivos que convocaban una familia. Estamos acostumbrados a tocar para familias, pero para la familia weichafera, van niños, adultos, de todo. Pero gente de otras tendencias musicales que convocan estos festivales no tanto. Somos una banda independiente que, para la gente que nos sigue, son reuniones muy rituales.

– Y los seguidores de ustedes se escapan de lo que es el público objetivo de Lollapalooza, ¿o no?
– No, creo que ahí hay un prejuicio. Nosotros no lo tenemos, nos interesa tocar para todo tipo de público, todos los estratos sociales tienen derecho a escuchar música y a tener empatía con discursos musicales. En todos lados hay problemáticas sociales y sensibilidad en torno a esas problemáticas. Fue sorpresivo porque fue mucho, había mucha gente, fue muy eufórico. Fue lindo, bonito para nosotros. Lleno de energía, es un show que venimos haciendo hace un tiempo, que tiene que ver con el disco nuevo Mundo Hostil. Siempre el recibimiento fue dentro de nuestro círculo. El Lollapalooza fue un culminar este verano de otros escenarios que no son los nuestros. Y en todos tuvimos una recepción súper buena.

– Llamaron la atención los mensajes en el Lollapalooza. ¿Por qué deciden hacer esto?
– Nosotros nos sumamos a todas esas causas que están pendientes y que vergüenza que sean tantas, hueón. Somos una banda consciente, que cree en un mundo conectado, consciente con el otro y con una libertad real, no esta mentira que nos tienen acostumbrados. Ponemos estos temas súper claros y certeros en la mesa, no como una imposición a nuestro público, apelamos a que exista una reflexión en torno a las cosas. Nos interesa que estén consciente de lo que pasa, a veces no todo el mundo que te sigue está claro con las cosas que suceden en términos sociales y a nosotros nos interesa eso.

– ¿Hubo una selección particular de los personajes que aparecieron en la pantalla?
– Son personajes que consideramos nefastos, que dividen la sociedad, que hablan mirándose el ombligo. Como Ena von Baer, cuidando sus privilegios y los de sus pares. O Ezzati, la institución católica está super arraigada, nosotros todos en Chile tenemos una culpa metida adentro y tiene que ver con una formación religiosa. Y ellos son los que mantienen eso, ¿cómo no se pueden sumar a una campaña a favor del condón? Si está lleno de cabros teniendo relaciones sexuales y la educación sexual es una miseria. Con el aborto lo mismo.

– Llamaba la atención que eran de todo ámbito. Desde Ezzati, Luksic, hasta Kiké Morande y Don Francisco.
– Es que puta, Kike Morandé poh…y Don Francisco, es cosa de ver sus programas…

– Aparte él aparece en el disco, Mundo Hostil… 
– Sí, en Me estái hueviando cuando dice que la mayor virtud de la Concertación fue respetar el modelo económico de Pinochet. ¡Cómo decís esa hueá! Este hueón es un latifundista que esclaviza gente, la estupidiza. Este tipo mató la mente reflexiva de la gente con su forma de entretención, dice que los artistas no pueden tener opinión política, esa hueá es una miseria. Y Kike Morandé es la misma hueá, un tipo que está en contra del aborto y todo el día te está bombardeando con sexo, no me hueís. Es un absurdo, un cinismo absurdo. La misma Cuarta, sus portadas son una miseria, son violentas, son programas violentos socialmente, donde se denigra a la mujer. Y tenemos que tener cuidado, hay cosas que son para la risa, pero también hay temas súper efervescentes que hay que tener mucha delicadeza para tratarlos y a estos hueones les da lo mismo. Eso es la manipulación a través de los medios masivos, porque finalmente son estas las caras en conexión directa con la gente.

– ¿Había relación con la letra y el mensaje, cierto? El «Wallmapu libre» salió mientras tocaban La Fuerza Viene de la Tierra.
– Sí, cada mensaje está vinculado a la letra de la canción. Las Cosas Simples con la igualdad de género por ejemplo, porque la canción habla de eso, de que somos todos seres humanos y necesitamos expresar lo que somos.

Fantasmas en un mundo hostil

El primer regreso de Weichafe, después de cinco años separados, fue en un Teatro Caupolicán repleto en diciembre de 2014. Después, el trío se abocó a la composición de lo que sería su quinto disco de estudio, Mundo Hostil.

El registro lo definió con creces: No solo estaban de vuelta, sino que con lo mejor que tenían.

– ¿Este es el mejor momento de Weichafe?
– Estamos en un muy buen momento, súper consciente de lo que hacemos, conectados con el público, consciente de lo que queremos hacer y no queremos.

– Nunca es fácil para una banda separarse y volver. Ustedes parece que lo están logrando.
– Siempre nos dijeron que las vueltas son malas. Pero no nos quedamos en eso. Nuestra carrera la tomamos como si lo estuviésemos haciendo por primera vez, como si fuese nuestro primer disco, siempre ha sido así. Por eso los discos tienen una relación energética entre uno y otro, hay un relato. Si escuchas de uno a otro, contamos una historia general, no copiamos el disco anterior. Los enfrentamos de manera espontánea y dejándonos llevar por lo que vemos en el momento, nuestras miradas políticas y sociales son súper arraigadas en nuestra vida cotidiana. Desde ahí va nuestro discurso.

– ¿Es Mundo Hostil el disco más político de todos?
– Creo que todos tiene una mirada. Nuestras letras vienen de nuestra relación con lo cotidiano y eso ya es una acción y mirada política. Quizá Mundo Hostil es más claro en eso.

– Es más literal. Canciones como Me estái hueviando no te dejan espacio a duda.
– Es súper literal. Pero ponte Harto de Todo habla de un tipo que no quiere estar en esta sociedad, que aborrece lo que acontece en este lugar. Pena de Ti lo mismo, es un tipo con crisis de pánico frente a un mundo y civilización que juega con la esclavitud solapada de este mundo, que ve que la gente está alienada. El Weichafe habla de nosotros, es el disco más autoral y por eso su nombre, habla de las cosas que nos suceden como seres humanos. Tierra Oscura del Sol es eso, tierra oscura del sol…todos tienen una mirada crítica.

– Eso de una letra arraigada en la realidad social, tiene tal vez en Mundo Hostil su expresión más clara. ¿Están más conscientes políticamente?
– No, estamos más grandes, podemos escribir de una manera más clara lo que queremos decir. Eso está directamente relacionado con el proceso creativo, cómo uno va madurando, al principio se ponen más ribetes, más cosas, más poético incluso para decir las cosas. Y cada vez vái limpiando eso y vái siendo mucho más directo. Aceptando, encontrándote con cómo quieres decir las cosas.

Te invento un presidente, cercano a la gente

Pierattini reconoce abiertamente que «nuestra música está vinculada con las minorías, con el que no tiene voz». Y entre esos, una influencia constante ha sido el pueblo mapuche. El nombre de la banda significa «guerrero» en mapudungun.

«Todas las estigmatizaciones encima de los mapuche son situaciones en los que la colonización los ha puesto. El pueblo mapuche de hoy no tiene nada que ver con lo que fue en su momento de gloria, lo han hecho mierda, lo han sacado de su eje y los locos resisten. Es un ejemplo de resistencia absoluto, un ejemplo para cualquier persona que se quiera alzar ante un sistema poderoso», afirma.

Reconocido seguidor de la coyuntura nacional, alza la voz ante la constante búsqueda de líderes: «Hay algo que me sorprende es esto de sumarse a nuevos movimientos de manera tan fácil. Hay que tener cuidado en que constantemente necesitamos de un líder y no estamos conectados con lo que necesitamos realmente, que es una conexión social, armar una buena trama social. La corrupción es lo primero que penetra en los líderes, el poder es una cosa muy fuerte, por cómo está construido. Finalmente es el sistema el problema, tu puedes llegar muy revolucionario, pero si no cuestionas el sistema no sirve».

– ¿Te refieres al Frente Amplio, a Beatriz Sánchez?
– Sí, creo les falta cuerpo. No hablemos de la Nueva Mayoria, Chile Vamos, Evópoli, esas hueás están muertas. Aquí hay algo que se está gestando y esgrimir discursos como ‘vamos contra la derecha’ son pobres. Es el mismo discurso de Lagos cuando Lavín casi se lo caga. Eso no es la herramienta. Cuando a mi me presentan un proyecto de corto alcance, sin proceso, pensando en que nosotros vamos a vivir el cambio, no lo creo. Uno tiene que pensar en sus hijos y sus nietos, las cosas van a suceder en tiempos más largos. La inmediatez fueron las cosas que propusieron todos los hueones que pusimos en la pantalla, de solucionar las cosas así no más y nadie puede hacer eso. Esa no es la manera, es un maquillaje, un discurso para que voten por ti. Ahora, hay que esperar a ver cómo se desarrolla también.

– ¿Les falta trabajo con organizaciones sociales? ¿En la calle, con la gente?
– Sí. Entiendo que este mundo funciona a través de caritas y rostros. Y ellos están utilizando esa estructura. La Beatriz Sánchez es una persona súper respetable como periodista, pero ver la foto de ella con Boric y Jackson y la gente atrás, me parece una muy mala señal. Eso comunicacionalmente me habla de lo mismo que los otros hueones. Tienen que ser más inteligentes, esa no es la manera. Acá tenemos un problema de sistema que es tremendo, paremos esto del «en la medida de lo posible». Cada vez le encontramos más la razón a Aylwin, como que en este país no se pueden hacer las cosas de otra manera, hay que ser muy DC parece. Me pasa que sigo medios alternativos como el de ustedes -porque seguir La Tercera es una campaña continua a Piñera todos los días- y veo eso. Veo un discurso que ya ha sido utilizado, maqueteado en campañas anteriores.

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La historia se escribe en la calle

Junto a otros músicos chilenos, Pierattini es parte del Frente de Música Nacional (FMN), una organización que lleva experiencias de músicos profesionales a colegios de zonas rurales. «Hay algo súper importante, que es que los músicos estamos súper lejanos de lo que es la malla curricular de un colegio. No sabemos que sucede ahí. Los profes de música no saben cómo se desarrolla una actividad profesional, no hay conexión directa con un músico que está haciendo música. Y un niño que va a un colegio muchas veces quiere ser músico y hacer música», cuenta.

– ¿Y cómo vincularse con esas realidades?
–  Los colegios tienen que vincularse con bandas que están haciendo música, ir a las salas de ensayo, por ejemplo, hacer convenios con bandas para hacer tocatas. Yo no conozco ninguna banda que no esté dispuesta a hacerlo, a ir a colegios. A través del FMN hemos hecho mucho eso. Ahí hay un vinculo básico, que es enseñarle a un niño que hacer música es una opción de vida.

– Algo que no suele estar en las prioridades en el futuro de un niño de zonas marginadas.
– Vivimos en un país donde las entretenciones en general, como el arte, son un lujo, no es una necesidad básica. El ir a conciertos, escuchar música, son experiencias que te van moldeando como mejor persona. Acá todos hablan de plata, la primera hueá que te habla alguien acá, con respecto a cualquier cosa, es respecto a la plata. Eso es lo que hay que cambiar para que las cosas tomen un cariz distinto. Yo creo que está empezando a suceder, pero tenemos que ser mucho más majaderos y nosotros como banda creemos que tenemos la responsabilidad de decirlo.

– Ustedes no son los primeros ni van a ser los últimos músicos chilenos en arraigarse en México. ¿Eso dice algo respecto a las condiciones que tienen los músicos acá en Chile?
– En Chile los músicos no tenemos nada de protección excepto el derecho de autor, que sería lo único que tenemos a favor en este sistema. Los tratos han mejorado con el tiempo, tal vez porque nos hemos puesto más conscientes de lo que se necesita. Estamos avanzando a un muy buen lugar la verdad, pero nosotros pusimos la mirada en México porque nos significa estar conectados con más espacios y no dejar de estar conectados con Chile. Acá las condiciones para los músicos nuevos son súper precarias.

– ¿Falta organización entre los músicos chilenos?
– Sí. Todo responde a nuestra idiosincrasia y nuestro carácter fundacional. Chile es un país fundado en un fundo, con una estructura de fundo, osea, Diego Portales es un Piñera. Nosotros no conocemos mucho nuestra historia, si lo hiciéramos veríamos donde estamos parados. Ahí radican muchos de los males, en esta construcción de un país que se abrió al colonizador para «mejorar la raza». Hay una esclavitud solapada en Chile que se ha transformado en ese orgullo del trabajo, eso que «el trabajo dignifica», por ejemplo, creo que es una frase terrorífica. No porque no me guste la disciplina, todo lo contrario, pero esa frase va dirigida a una esclavitud solapada, a decirle todo que sí al jefe.

Kermesse de desepdida

A mediados de junio, Pierattini, Da Venezia y Ugarte parten a radicarse en Ciudad de México, con familias y todo. Convencidos de que se les abrirán las escenas de Latinoamérica. Es por eso que preparan una última gran fiesta para la familia weichafera. Será en el Arena de Recoleta el 3 de junio próximo, en una kermesse de despedida.

– ¿Por qué en Recoleta?
– Podríamos haber hecho un Caupolicán o un Cariola, pero no quisimos. Si tenemos que hacer dos, tres, cuatro Recoletas, lo vamos a hacer. Pero priorizamos el contacto directo con nuestro público. Los weichaferos siempre se juntan a hacer una previa, un asado en parque, lo que sea. Ahora dijimos: «véngase pa acá, hagamos la previa juntos». Va ser una gran fiesta para celebrar como queríamos, de manera cercana y familiar, la despedida. Porque es una cosa importante, no es subirse al escenario y tírenme flores. Weichafe es una causal de muchas cosas, en la música, las letras, el público. Ese día va estar la médula de Weichafe.

– ¿Por qué una kermesse?
– Es el concepto que lo traduce de mejor manera, una médula familiar, amistosa. Aquí cantamos todos juntos en los shows, una gran banda, una gran familia. Y eso tenía que estar presente en todos los niveles, comer completos juntos, papas fritas, bebidas. Van a haber niños, vamos a estar con nuestras familias, va a ser una hermosa despedida.