El historial de actuación política de Lava Jato y el curioso timing de la reciente acusación a Bachelet

Desde mayo de este año, el medio digital The Intercept, dirigido por el reconocido periodista estadounidense Glenn Greenwald (ganador del Pulitzer en 2014 por los reportajes con las revelaciones de Edward Snowden), empezó a publicar una serie de denuncias de las manipulaciones realizadas por los fiscales de la celebrada operación Lava Jato, que trataba de la corrupción en la estatal petrolera brasileña Petrobras, y que tiene como su más grande resultado la condena al expresidente Lula da Silva.

Los reportajes de la serie, bautizada como “Vaza Jato” (o “filtra jato”, en español) están basadas en la filtración de un gigantesco archivo que contiene más de 4 años de conversaciones entre los fiscales en un chat privado que mantienen en la plataforma Telegram, y que contiene mensajes de texto, audios, fotos y videos.

Poquísimos medios fuera de Brasil se atreven a publicar las revelaciones de Lava Jato, pese a que The Intercept actúa en sociedad con medios que no son para nada progresistas, como el diario Folha de São Paulo, la Radio Bandeirantes y la revista semanal Veja. Todos ellos son de línea editorial conservadora o neoliberal. En Chile, El Desconcierto es uno de los pocos que ha reproducido casi todas las revelaciones de la serie de reportajes.

Estas han sido las principales revelaciones de los reportajes de The Intercept:

1) Pese a que empezó a publicarse en mayo, la primera gran revelación de la serie vino en junio, cuando se mostró una conversación por chat entre el fiscal jefe de Lava Jato, Deltan Dallagnol, y el entonces juez Sérgio Moro (hoy ministro de Justicia del gobierno de Jair Bolsonaro). En la charla, los dos tratan de sintonizar el discurso entre la fiscalía y el juicio, lo que de por sí ya sería ilegal, pero además Dallagnol le confiesa a Moro que no está seguro de la contundencia de las pruebas en contra de Lula da Silva, y el magistrado trata de tranquilizarlo. El Desconcierto, 10 de junio de 2019.

2) El segundo gran reportaje de “Vaza Jato” mostró a Moro ordenando a los fiscales hacer un operativo de prensa en contra de Lula para poner a la opinión pública en su contra, lo que fue prontamente atendido. Básicamente, los fiscales emitieron un comunicado condenando un supuesto intento de Lula de inculpar a su fallecida esposa, Marisa Letícia, por los crímenes en los que ambos estaban acusados, para dañar su imagen. No era verdad, Lula y su equipo defensor siempre sostuvieron el discurso de inocencia para él y también su esposa, pese a que gran parte de la prensa aceptó la versión falsa de Lava Jato. El Desconcierto, 15 de junio de 2019.

3) Otra revelación importante fue la que mostró que los fiscales de Lava Jato fingieron investigar al expresidente Fernando Henrique Cardoso para dar imagen de imparcialidad. Cardoso es un sociólogo muy cercano al exmandatario chileno Ricardo Lagos Escobar, y que pese a ser socialdemócrata, tuvo un gobierno muy marcado por su plano económico neoliberal, por lo que se volvió el principal líder de la derecha brasileña desde entonces y, por supuesto, el principal opositor y rival político de Lula da Silva. Según la filtración revelada por The Intercept, los fiscales no querían dañar a Cardoso, sino que solo denunciarlo para evitar que la opinión pública pensara que Lava Jato era sesgada en contra de la izquierda. Sin embargo, el juez Sérgio Moro impidió tal acción, diciendo que el político neoliberal era “un apoyo muy importante, por lo que no debemos importunarlo”. El Desconcierto, 18 de junio de 2019.

4) La más bombástica de las revelaciones dentro de la serie de reportajes “Vaza Jato”, y que tiene mucho que ver con la reciente acusación a Bachelet, es el chat que muestra el jefe de los fiscales, Deltan Dallagnol, dando instrucciones sobre cómo habría que proceder con el empresario Léo Pinheiro, quien en aquel entonces ya estaba condenado por corrupción en contratos con Petrobras, para que su testimonio solo pudiera rendirle beneficios de disminución de la pena si su versión involucrase a Lula da Silva. Sus dos primeros testimonios sostuvieron que el exmandatario no tenía relación con los casos investigados por Lava Jato, por lo que Dallagnol decidió descartarlos. Para que la tercera fuera la vencida, Lava Jato incluso obligó a Pinheiro a cambiar su abogado por uno que entendiera que solo podría recibir ventajas si su versión fuera la deseada por los fiscales. Sin embargo, tras sacar la versión que quería, Dallagnol da instrucciones para que “pensemos en el timing de ese nuevo acuerdo, para que no parezca que fue un premio por la condena a Lula”. El Desconcierto, 30 de junio de 2019.

5) Otra revelación interesante fue la que muestra que no solo Sérgio Moro se ganó un ministerio tras su actuación como magistrado responsable por la Operación Lava Jato, sino que también dos de los fiscales (Roberson Pozzobon y el jefe del equipo, Deltan Dallagnol) llegaron a crear una empresa, registrada a nombre de sus esposas, para administrar sus imágenes como conferencistas, servicio por el cual cobran un altísimo valor. Curiosamente, esos mismos fiscales acusaron a Lula da Silva de disfrazar parte de la supuesta corrupción recibida por él en conferencia que el expresidente sí ha realizado, pero que ellos consideraron truchas. Una de ellas tuvo lugar fue en Chile, e involucra ahora a la expresidenta chilena Michelle Bachelet. El Desconcierto, 16 de julio de 2019.

6) Nuevamente la curiosa relación entre Lava Jato y representantes del mundo privado financiero. De esa vez, el fiscal jefe Deltan Dallagnol fue sorprendido negociando con una asesora comunicacional del grupo inversor XP Inversiones una conferencia para hablar “sobre las elecciones”. La asesora también aseguró que el encuentro sería “privado” y no sería noticiado por la prensa, y ocurrió a mediados de 2018, pocos meses antes de los comicios presidenciales (octubre del mismo año). El Desconcierto, 28 de julio de 2019.

7) Otra importantísima revelación muestra el entonces juez Moro ordenando la filtración a la prensa de un video clave en contra de Lula da Silva, para que este influenciara en las elecciones de 2018. El video mostraba el testimonio de un exministro de los gobiernos del PT (Partido de los Trabajadores, de Lula y Dilma), que llegó a los medios de prensa brasileños seis días antes de la fecha en que se realizó la primera vuelta electoral. Nuevamente, el timing político de Lava Jato queda evidenciado, al igual que su relación con algunos medios de prensa. El Desconcierto, 29 de julio de 2019.

8) En otra destacada revelación, el fiscal jefe Deltan Dallagnol aparece confesando haber cometido una ilegalidad movido por razones políticas y no jurídicas. El reportaje mostró los bastidores de la filtración a la prensa de una escucha no autorizada de conversación telefónica privada entre el expresidente Lula da Silva y la entonces presidenta Dilma Rousseff. Para justificar su conducta entre sus colegas, que cuestionaron tal medida y la consideraban fuera de lugar, Dallagnol alegó que la cuestión jurídica era “un detalle”, y que la filtración de las escuchas respondía a “un contexto principal, que es político”. El Desconcierto, 8 de septiembre de 2019.

9) La última gran revelación de “Vaza Jato” ocurrió esta semana, y muestra una campaña para derrocar a un juez del Supremo Tribunal Federal, más importante órgano del Poder Judicial brasileño, que contó con la participación oculta de fiscales de Lava Jato. El blanco de la campaña fue Gilmar Mendes, magistrado conocido por ser el más abiertamente crítico a Lava Jato en la Corte de Brasilia. El Desconcierto, 17 de septiembre de 2019.

Entre las varias cosas que se pueden observar en todos esos casos, está la preocupación extrema de los fiscales en “parecer imparciales ante la opinión pública”, aun cuando, en la práctica, claramente no lo estaba haciendo.

Otro tema muy claro es el timing político, pues las revelaciones eran filtradas a la prensa en los momentos justos en que Lava Jato necesitaba producir algo que tuviera efectos políticos, incluso en períodos cercanos a la campaña electoral en Brasil. El tercer punto está ligado al anterior, y es la relación de los fiscales con algunos medios de prensa. En entrevistas recientes, el periodista jefe de The Intercept, Glenn Greenwald, apuntó al canal televisivo Globo y al medio digital O Antagonista como los principales aliados de Lava Jato y sus operaciones.

Y tras entender lo que significan esas dos últimas características citadas, llama más aún la atención que la reciente denuncia en contra de Bachelet sea producto de una filtración de Lava Jato, también basada en un testimonio del empresario Léo Pinheiro, y también con un timing político impresionante, si consideramos que surge pocos días después de que la exmandataria chilena se convirtiera en una de las más grandes adversarias internacionales del presidente brasileño Jair Bolsonaro.

Para completar el combo de increíbles coincidencias, el empresario Léo Pinheiro sale a prisión domiciliaria,  justo el día siguiente a la declaración en la que involucra a Bachelet. Habrá que ver, después de todo eso, cuáles serán los próximos capítulos de esa trama, en Brasil y en Chile, y qué otras grandes coincidencias surgirán en esas dos novelas de la vida real.