La presidenta de la asociación, Soledad Piñeiro, señaló que «la sujeción a las normas y la justificación de las decisiones es lo que permite que las personas tengan la garantía y seguridad de que sus conflictos están siendo resueltos y gobernados por las leyes».
Luego de que este miércoles la jueza Andrea Acevedo dejara con firma semanal y arraigo nacional al carabinero que atropelló y mató al hincha de Colo Colo, Jorge Mora, la presidenta de la Asociación de Magistrados, Soledad Piñeiro, criticó la actuación de la profesional.
Durante la audiencia, Acevedo reparó en la «carga histórica (de la Garra Blanca), que para el deporte no hace ninguna contribución” y señaló que parte de los hinchas de Colo Colo «tienen una actitud no muy acorde a las reglas sociales y al estado de derecho en general».
Igualmente, señaló que al momento del atropello al carabinero le estaban lanzando piedras y no «flores o challa». También esbozó que el fallecido podría haber estado bajo los efectos del alcohol, por el sólo hecho de que venía saliendo del estadio.
Luego de la resolución de la jueza, que dejó insatisfechos a muchos, Piñeiro señaló que los jueces y juezas están obligados a «ajustar sus resoluciones sólo a las leyes y a los antecedentes de la causa”.
Y agregó que también se les impone «el deber de fundamentación como herramienta que permite el control a través de recursos”.
“No es admisible que juzgadores utilicen prejuicios ni acudan a evaluaciones políticas, culturales o sociales personales que no sea posible desprender de los antecedentes de la causa para resolver lo sometido a su conocimiento”, indicó la magistrada sobre la actuación de Acevedo.
Piñeiro reconoció que “todos los jueces tienen opiniones personales sobre las cosas y visiones sobre los fenómenos sociales y políticos», pero puntualizó que «precisamente la sujeción a las normas y la justificación de las decisiones es lo que permite que las personas tengan la garantía y seguridad de que sus conflictos están siendo resueltos y gobernados por las leyes, y no por el arbitrio personal del adjudicador”.
