Todos los dardos apuntaban ayer contra el escritor Rafael Gumucio, quien en su particular estilo, cuestionó al feminismo y trató las tomas feministas en las universidades de ser «movimientos de mujeres solteras, sin hijos ni demasiados problemas económicos».
Gumucio se volvió tema dado el rechazo transversal a sus dichos. Pero no podían ser todo. Matías del Río quiso salir en defensa de su colega en Duna y derechamente lo alabó «por atreverse a contradecir, con argumentos, a las corrientes de opinión mayoritarias, y pagar altos costos por eso».
Por si fuera poco, cerró así su comentario: Si no es ése el papel de un intelectual, ¿cuál es?».
Obviamente las reacciones no faltaron y el conductor se llenó de críticas en las redes sociales.