Francisco Álvarez, ex seremi de Salud de Valparaíso | Agencia Uno
«Al escuchar las reacciones de entidades reconocidas como el Colegio Médico y de forma transversal (de) la mayoría de los gremios del sector salud, queda en evidencia lo inoportuno de dejar la Secretaría Regional de Salud sin conducción justo ahora que se inicia un plan inédito de vacunación. En lo inmediato, hay desafíos sanitarios muy importantes, que no admiten espacio a la improvisación», transparenta el químico farmacéutico de profesión, a días de haber sido cesado de su cargo en una decisión que, cuenta, le comunicó la subsecretaria Paula Daza.
Desde el inicio de esta semana, Francisco Álvarez ya no encabeza la Seremi de Salud de Valparaíso, cargo desde el que adquirió importante notoriedad mediática, no sólo por su gestión al frente de la pandemia, sino por haberse contagiado de COVID-19 e incluso haber estado intubado en medio de un ambiente de gran preocupación debido a que su vida se vio seriamente amenazada a causa del virus que al país ya le ha significado sobre 24.000 pérdidas humanas.
Su salida del cargo ha sido resentida no sólo por él, sino por agrupaciones gremiales que además de no aceptar su desvinculación, solicitan su reintegro al puesto que actualmente ocupa el abogado Emilio del Solar, en desmedro del químico farmacéutico de profesión.
A tal punto ha llegado la resistencia frente a su salida, que este martes distintos colectivos hicieron un llamado al Ejecutivo a que recapacite respecto a la remoción del seremi. Entre los que hacen esta convocatoria destacan la Federación Fenats Nacional de Valparaíso, la Fenfusan, la Multigremial del Hospital Claudio Vicuña de San Antonio y representantes de la Central Unitaria de Trabajadores de la Quinta Región, «todos (quienes) defienden la labor y el fuerte compromiso con sus responsabilidades de Álvarez y acusan al gobierno de querer cambiarlo por razones políticas».
«Si bien el seremi es de derecha, ha causado molestia en el gobierno, porque es quien se atrevió a cursar el parte al presidente Sebastián Piñera cuando andaba sin mascarilla, paseando por la playa y es también quien hizo un sumario a las fiestas de los niños acomodados de Cachagua. No le tembló la mano para aplicar igualdad ante la ley y eso seguramente molestó», asegura Luz María Viveros, presidenta de la Fenats Nacional de Valparaíso en un comunicado público.
Viveros, en línea con otros dirigentes sindicales de la región, destaca el compromiso del seremi en la lucha contra el COVID-19, relevando el hecho de que incluso trabajando se contagió de la enfermedad. «Estuvo grave, conectado a un ventilador y apenas salió del hospital, siguió dando la batalla en las calles», agregó la dirigenta.
«Francisco Álvarez se encontraba hasta el sábado, día en que le comunicaron que tomara dos semanas de vacaciones y presentara su renuncia, recorriendo las playas del litoral, fiscalizando y educando a la gente en terreno», dice luego en una declaración pública enviada a este medio.
Paralelamente, el presidente de la Multigremial del Hospital Claudio Vicuña, Patricio Velásquez, complementó los dichos de su colega, cuestionando la salida del funcionario público. «La remoción de Álvarez es una mala jugada del ministro de Salud, porque se le acusa de mala gestión debido al alto índice de contagios de Covid en la región, cuando fue el gobierno y, específicamente el ministro (Enrique) Paris quien otorgó indiscriminadamente los permisos de vacaciones», declaró.
Adicionalmente, agregó que le parece sospechoso que el cambio de seremi se pida justo a pocos días de comenzar el proceso de inmunización masiva de la población.
Respecto de la decisión del intendente de la Quinta Región, Jorge Martínez, quien optó por Del Solar para ocupar la vacante generada tras salida de Álvarez, los gremios de la Salud no sólo evidencian su disconformidad al respecto, sino que insisten en que debe recuperar su puesto porque tiene cercanía con la coyuntura y sus necesidades, dada su profesión. Adicionalmente, destacan que «ha desarrollado una de las mejores gestiones en ese cargo».
«Los gremios solicitan al gobierno y al ministro Enrique Paris, reconsiderar la medida y dejar a Francisco Álvarez en su cargo (…) hacer un cambio a estas alturas y en plena crisis sanitaria, sólo significará un retroceso y un riesgo innecesario», se lee en el documento en el que apelan a que la salida se revierta.
Consultado por los hechos, vía Whatsapp, la ex autoridad hizo llegar a El Desconcierto análogas declaraciones a las que emitió a la edición de este martes de El Mercurio de Valparaíso, confirmando que fue la subsecretaria de Salud Paula Daza quien le comunicó su salida.
«Me quiso hacer ver que mi relación con el actual intendente no daba para más», dice al tiempo que admite que este argumento llamó su atención. «Me sorprendió, ya que él nunca lo manifestó directamente (…) Considero que la situación sanitaria está sobre cualquier afinidad personal que se pueda tener o quien figura más o menos en los medios de comunicación. La gente hoy necesita información, y al mismo tiempo, que las autoridades estén a la altura de las circunstancias», transparentó.
En relación a la resistencia que ha generado su salida, el cesado seremi dice sentirse orgulloso del reconocimiento a su trabajo. «He leído mucho de los comentarios que han escrito en redes sociales como también las miles de llamadas y mensajes que me han mandado directamente (…) Que después de todo el sacrificio de estar 24/7 con los pies en la calles, con la gente y escuchando sus inquietudes, tratando siempre de pensar cómo podemos mejorar, cómo podemos hacer mejor las cosas, siempre en equipo y con todos los actores y sectores, me resulta muy gratificante», declara.
Y agrega que su compromiso es con la gente. «Siempre estaré a disposición de la comunidad, sea donde sea que pueda estar, esa es mi vocación de servicio público».
Adicionalmente, Álvarez comenta sobre su despido que «al escuchar las reacciones de entidades reconocidas como el Colegio Médico y de forma transversal (de) la mayoría de los gremios del sector salud, queda en evidencia lo inoportuno de dejar la Secretaría Regional de Salud sin conducción justo ahora que se inicia un plan inédito de vacunación. En lo inmediato, hay desafíos sanitarios muy importantes, que no admiten espacio a la improvisación».
Por último, cuando le consultamos específicamente si cree que su salida estuvo vinculada al sumario que le cursó a Sebastián Piñera por andar sin mascarilla paseando por el borde costero en Cachagua, desestima que este hecho lo haya alejado del cargo que ejercía hasta el fin de semana.
«Si bien se instaló algún tipo de suspicacia, no creo que mi salida tenga relación con eso. En su minuto hice lo que tenía que hacer y el Presidente lo entendió perfectamente. Mi salida obedece a otras razones, las cuales creo que ya están claras para la ciudadanía», concluyó.
