Cárcel (referencial) | Agencia Uno
Según informó la Asociación Nacional de Funcionarios Penitenciarios, dieron inicio a una jornada de paralización de actividades en todo el país, por cuanto “nuestro personal no está de acuerdo en volver de manera abrupta a cumplir funciones normales en las distintas unidades penales mientras esté vigente el Estado de Excepción Constitucional”, para “evitar contagios masivos y salvaguardar la salud de funcionarios e internos, debido al hacinamiento existente en una gran mayoría de las unidades penales del país”.
La Asociación Nacional de Funcionarios Penitenciarios (Anfup) se manifestó este lunes contraria al retorno a “la normalidad”, tras el avance en el desconfinamiento anunciado por las autoridades sanitarias.
De acuerdo con la Anfup, uno de los 12 gremios de Gendarmería, no están las condiciones en los recintos penitenciarios como para que las y los trabajadores vuelvan a sus labores normales.
Según informó el gremio a través de un comunicado, dieron inicio a una jornada de paralización de actividades en todo el país, por cuanto “nuestro personal no está de acuerdo en volver de manera abrupta a cumplir funciones normales en las distintas unidades penales mientras esté vigente el Estado de Excepción Constitucional”.
Lo anterior, para “evitar contagios masivos y salvaguardar la salud de funcionarios e internos, debido al hacinamiento existente en una gran mayoría de las unidades penales del país”.
Como ejemplo, las y los funcionarios citaron la unidad penal de Santiago 1, la cual tiene una capacidad máxima de 2.900 reclusos y “en la actualidad alberga mas de 5.000 usuarios”. Así también, se refirieron al CCP de Valparaiso, “el cual fue construido para 1.200 internos y en la actualidad alberga mas de 2.400”.
“Si se generara un brote masivo de contagio de la población penal en estos y otros recintos penales del país, colapsaría cualquier sistema de salud regional, generando un déficit en ventiladores mecánicos existentes y camas críticas en los recintos asistenciales” [sic], alertaron desde la Anfup.
Lo anterior, considerando el informe COVID-19 del Ministerio de Salud, el cual “indica que quedarían 515 camas críticas a lo largo de todo el país, lo cual lo hace mas preocupante al albergar en la actualidad una población penal total recluida de 45.713 internos en el sistema cerrado de los cuales son 42.400 hombres y 3.313 mujeres”.
En ese sentido, la Anfup señaló que, como asociación gremial “mayoritaria de Gendarmería de Chile y del sector público, no se hará parte de decisiones tozudas y caprichosas de la autoridad del servicio, pudiendo lamentar posibles contagios masivos y sobre exposición del personal que labora día a día en las distintas unidades penales del país”.
“Con esta decisión se esta poniendo en riesgo la salud de funcionarios, internos y la seguridad ciudadana, por el eventual colapso que pueden sufrir los establecimientos penitenciarios y el sistema de salud pública”, cerraron.
