Joseph Stiglitz desclasifica discusiones con Milton Friedman: «No era un buen economista»

En su visita a Chile, el economista estadounidense Joseph Stiglitz (79), desclasificó algunas de las discusiones que tuvo con Milton Friedman cuando coincidieron en las universidades de Stanford y Chicago.

En el foro organizado por Espacio Público —donde también participaron Eduardo Engel, Ignacio Briones y Jeanette von Wolfersdorff— , el premio Nobel de Economía 2001 partió mostrando su entusiasmo por las declaraciones que señalaban que «Chile era el lugar donde nació el neoliberalismo y Chile será el lugar donde se enterrará este modelo».

En ese contexto, entregó detalles de los debates que tuvo con Milton Friedman, uno de los economistas más influyentes de los años 70, especialmente en Chile, donde fue un estrecho colaborador de la dictadura.

Stiglitz, sin embargo, cuestionó sus reales capacidades. «Podíamos estar en conversaciones eternas y a él no le interesaba en realidad saber qué estaba mal en el análisis que yo estaba presentando. Él sabía la verdad, tenía inspiración divina de que los mercados eran eficientes y escribió un libro, de hecho, que se llama Usted es libre de elegir. Yo creo que el título del libro tendría que haber sido Usted es libre de explotar«, cuestionó.

«El punto central aquí es que Milton Friedman no era un buen economista. Escribió buenos documentos, buenos estudios cuando era joven, pero aún así, luego se transformó en un ideólogo y abogó por una ideología de derecha, desde el punto de vista económico, que no le interesaba el debate analítico. Y eso también se propagó mucho a sus discípulos», añadió.

Foto: Espacio Público

La era de la crítica al neoliberalismo, según Stiglitz

El economista estadounidense también entregó visos de sus estudios económicos y subrayó que en los últimos años «hemos visto que los mercados no han funcionado», y que el Estado se ha erigido como su principal salvador.

En ese contexto, mencionó grandes avances científicos, como las vacunas contra el coronavirus, el internet y los motores de búsqueda, todos financiados por el gobierno estadounidense.

«Todas las innovaciones que existen en Estados Unidos se financian con fondos públicos, incluso Tesla con su vehículo eléctrico. A Elon Musk y sus campeones les va bien en el sector privado, pero tienen medio millón de dólares que han recibido del gobierno estadounidense, pero él no lo menciona, por supuesto. Él no habría podido conseguir sus logros sin ese aporte», agregó.

Para Stiglitz, «los mercados no existen en el vacío, siempre están estructurados. Y la forma de estructurarlos nos lleva a más o menos inequidad social».

En ese sentido, el autor de Capitalismo progresista y El precio de la desigualdad concluyó que fracasaron todas las promesas neoliberales: mayor crecimiento económico, más estabilidad y una economía de la que todos se benefician. «Todas estas proposiciones han sido erróneas», subrayó.

El economista estadounidense lo graficó señalando que «el crecimiento tras la Segunda Guerra Mundial en las últimas tres décadas fue mucho más alto, tanto en Europa como en Estados Unidos, de lo que ha sido en la era del neoliberalismo. ¡Imagínense, menor crecimiento!».

También ironizó con la reacción de los bancos tras el colapso subprime de 2008. «Los banqueros dijeron por qué solamente están ofreciendo 720 millones de dólares. Estos son los mismos banqueros que estuvieron a favor de que no hubiera intervención gubernamental en los mercados antes de la crisis».

«Esto muestra entonces que no había un compromiso intelectual para revitalizar el mercado. O hasta cierto punto, dejar todo en manos del mercado, hasta que nosotros necesitáramos el Estado. No se trataba de la regulación, se trataba de establecer regulaciones que beneficiaran al sector financiero. ¿Qué quiere decir esto? Todo mercado y estructura tiene reglas detalladas que hacen una gran diferencia», puntualizó.