Nuevo plan regulador de Santiago prioriza torres en altura y no inmuebles históricos

El pasado 9 de noviembre, el concejo municipal de Santiago aprobó modificar el Plan Regulador Comunal con nueve votos a favor y el voto en contra de Rosario Carvajal, concejala independiente y presidenta de la Comisión de Barrios, Patrimonio y Desarrollo Urbano del Concejo Municipal. 

Plan regulador con “claras medidas que favorecen a las inmobiliarias”, según explicó la concejala. Esto debido a que si bien las modificaciones contemplan la designación del Conjunto Gabriela Mistral, que incluye al GAM y la Torre Villavicencio como Inmueble de Conservación Histórica, su aprobación le otorgará mayores beneficios de construcción a las inmobiliarias. 

“Esto tiene una implicancia en los inmuebles de conservación histórica, para permitir la densificación en su entorno”, advierte Carvajal. Es decir, el nuevo plan regulador permitirá la construcción colindante de edificios en altura a estos inmuebles de conservación histórica, denominados así para protegerlos de futuras demoliciones o modificaciones arquitectónicas por su importancia patrimonial e histórica. 

Más altura

Aunque gracias a la intervención de la comunidad las líneas imaginarias (rasantes) que salen desde dichos inmuebles hacia sus colindantes será de 45 grados, y no de 60 como es la norma de construcción general para la Región Metropolitana. “La comunidad lo propuso así para ganar algo”, puntualizó Carvajal. 

Lo que otorgará mayor espacio de separación entre los inmuebles y los edificios contiguos; aunque la petición principal de la comunidad relacionada a la altura de dichas edificaciones no fue considerada dentro del nuevo plan regulador. 

¿Qué son las rasantes? Revisa la gráfica a continuación

Observaciones ciudadanas aprobadas por concejo municipal.

Negocio inmobiliario

Tras ser consultada por estos cambios, Carvajal explicó a El Mercurio que la modificación aprobó la desafectación del cité San Francisco 366 de su categoría de inmueble patrimonial, para “permitir obras que contribuyan a la calidad de vida de sus residentes, que hoy viven rodeados de edificios de gran altura”, según la municipalidad. 

Aunque la concejala sostiene que, precisamente, sus dueñas estaban en conversaciones con una inmobiliaria y “necesitaban la desafectación para demoler y vender a la inmobiliaria que tiene un proyecto en ese paño”, situación que era de conocimiento público, tanto para la municipalidad como para los concejales. 

Si bien el proyecto está en su trámite final, y debe pasar por la Seremi de Vivienda para su decreto desde la municipalidad, Carvajal y las comunidades con las que trabaja directamente sienten la resolución municipal, ya que la propuesta bien pudo retroceder a su etapa de participación ciudadana, o ser rechazada. 

“Y así poder modificarlo y acoger las observaciones de la comunidad para bajar las alturas y promover las áreas verdes, que eran las principales demandas en las audiencias públicas a las que la alcaldesa (Irací Hassler) asistió cuando era concejala”, concluyó Carvajal.

Nuestra opinión en el Mercurio sobre cambios al Plan Regulador.
El Cité (conjunto de viviendas sociales, solución habitacional a los problemas sanitarios en S XIX) será demolido tras desafectación que votó concejo de Stgo, el miércoles pasado, en favor de un negocio inmobiliario. pic.twitter.com/1fCsIf3nde

— Rosario Carvajal Concejala por Santiago (@rosarioxstgo) November 13, 2022