Avisos Legales
Reportajes

Antonia Rivas: «La plurinacionalidad, semánticamente, es una discusión que no voy a dar»

Por: Camilo Espinoza | Publicado: 04.02.2023
Antonia Rivas: «La plurinacionalidad, semánticamente, es una discusión que no voy a dar» Antonia Rivas | Foto: Cedida
La integrante del Comité de Expertos elegida por el Frente Amplio entrega luces sobre cómo podrían ser abordados los pueblos originarios en este nuevo proceso constituyente. También le responde a Máximo Pavez sobre uno de los temas clave: «Yo creo que el Estado social y democrático de Derecho sí pone fin al principio de subsidiariedad».

Antonia Rivas Palma (39) es una de los 21 abogados que formarán parte del Comité de Expertos del nuevo proceso constituyente. Sin embargo, a diferencia de varios de ellos, su formación se desarrolló lejos de la litigación y los tribunales.

Es doctora en Antropología Sociocultural de la Universidad de California en Berkeley. Sus estudios se han centrado en el derecho internacional de los pueblos indígenas, y en las posibilidad de diálogo intercultural. Durante la Convención, fue asesora de la representante del pueblo Rapa Nui, Tiare Aguilera.

Ahora es una de las expertas elegidas por el Frente Amplio. Cuenta a El Desconcierto que «siempre estuve dispuesta a participar en el proceso. Me llamó la directiva de Convergencia Social, hablamos de prioridades, temas, posibilidades, ideas. No nos conocíamos, pero tuvimos una muy buena conversación».

«El proceso tiene que ser muy abierto, muy serio y muy sobrio»

– ¿Cómo cree que se resuelven las dudas que hay sobre la legitimidad del Comité de Expertos, pensando que se trata de un órgano designado?

El Comité de Expertos marca una etapa más del proceso, en un momento político y social súper contradictorio como en el que estamos. No es fácil leer lo que piensa en la ciudadanía, es un momento complejo en términos de representación, no solo nacional, sino que mundial.

Dicho esto, yo creo que la legitimidad del Comité de Expertos está dada por las fuerzas políticas que, frente a una crisis institucional grande como la que tuvimos, frente a la incertidumbre, fueron capaces de ponerse de acuerdo, de llegar a una salida institucional con estos bordes.

Algunos de estos bordes los compartiré más, otros menos, pero en conjunto es importante celebrar que se dio esa salida institucional. No hay que confundirse, esto pudo haber terminado de otra forma.

– ¿Cree entonces que es una legitimidad que se pueda ir ganando en el camino?

Yo creo que va a ser súper importante el texto final y el proceso. Por eso, el proceso tiene que ser muy abierto, muy transparente, muy serio y muy sobrio en sus discusiones. Ese es el gran desafío.

Entiendo que ahora haya mucha gente escéptica, con dudas de legitimidad. Yo los invitaría a tener paciencia, no tomar una decisión apresurada, leer el texto final y participar del proceso. Hay instancias de incidencia y de participación que van a ser relevantes.

– ¿Cree que la Comisión de Expertos parte con el pie izquierdo al confirmarse que Hernán Larraín será el presidente de la primera sesión?

No quiero comentar nada sobre mis compañeros de trabajo, porque encuentro que es importante mantener un trato cordial y educado para llegar a acuerdos. Más allá de que yo tenga opiniones personales sobre los nombramientos de cada uno de los bloques, es importante que nos respetemos y que generemos un clima de diálogo y cordialidad, porque de otra manera esto no va a resultar.

Además, es importante aclarar que esa presidencia va a durar lo que nos demoremos en elegir un presidente o una presidenta. Puede ser presidente durante 20 minutos o una hora. Esa era la norma del reglamento que decía que la persona de mayor edad presidía la elección.

Ahora bien, evidentemente aquí tenemos perfiles muy distintos. Hay perfiles más técnicos y menos políticos en el oficialismo; y perfiles más políticos en la oposición. Eso puede ser una ventaja o una desventaja, lo vamos a ver en el momento en que se lleve adelante la conversación.

«Escuché al comisionado Pavez y me parece que vamos a tener un disenso»

– Dijo que habían algunos bordes que le gustaban más, y otros que le gustaban menos. ¿Cuáles son? 

Yo creo que los bordes no van a ser complicados. Es cierto que nos marcan una pauta bien importante respecto a ciertos temas que podrían estar sujetos a la deliberación, como el sistema político y el sistema legislativo. Pero hay ciertas cosas donde no creo que haya consenso, como el Estado social y democrático de Derecho.

– Justamente, Máximo Pavez relativizó el Estado social y democrático de Derecho en un debate en CNN… 

Yo escuché al comisionado Pavez y me parece que vamos a tener un disenso importante. Yo creo que el Estado social y democrático de Derecho sí pone fin al principio de subsidiariedad, sí garantiza la prestación de garantías y derechos sociales.

Lo que tendremos que debatir es cómo participan los privados, y ahí yo creo que hay que tener una apertura importante al diálogo, pero reconociendo que acá tiene que haber un predominio y una garantía estatal de producción de derechos sociales relevantes, que es lo que la ciudadanía demanda.

– ¿Por qué es importante que haya claridad sobre el Estado social y democrático de derecho?

Si bien te decía que no es fácil analizar el momento actual porque es contradictorio, es complejo y es poroso, sí hay algo muy claro de la ciudadanía, que tiene que ver con que hay un hastío de los abusos, de sentirse vulnerados de sus derechos. Eso está intrínsecamente vinculado con la idea de un Estado social y democrático Derecho.

La Constitución no va a resolver todos los problemas, es evidente. Pero sí la forma en que miramos y nos enfrentamos a servicios y a derechos sociales.

«La plurinacionalidad no es un estándar internacional»

– ¿Qué muere de la plurinacionalidad, que era la gran propuesta en materia de pueblos originarios de la Constitución que se rechazó?

Aquí hubo un problema de que no fuimos capaces de explicar claramente los significados y los contornos de la plurinacionalidad. Esto es muy técnico, pero al hablar de naciones indígenas y de nacionalidad, se generó una confusión. La nacionalidad chilena siempre siguió siendo la nacionalidad chilena, no es que en este país se planteara reconocer muchas nacionalidades, sino pueblos, que además se autodenominan como naciones.

Entonces, en cuanto a la palabra y al término, la plurinacionalidad, semánticamente, es una discusión que no voy a dar al interior de la Comisión. Hay que aprender de las lecciones pasadas.

– ¿Y qué queda de la plurinacionalidad?

La plurinacionalidad es el reconocimiento de la existencia de los pueblos indígenas al interior de un país, de un mismo Estado, y de sus derechos colectivos en virtud de su derecho a la libre determinación reconocida por el derecho internacional. Eso es la plurinacionalidad, y eso yo lo voy a impulsar. Además, el reconocimiento de los derechos colectivos es algo a lo que Chile ya se comprometió.

– ¿Cuál es su evaluación de la participación de pueblos indígenas en el proceso anterior?

Fue muy injusto lo que pasó en el proceso anterior y también en este proceso, porque se les transformó en culpables de un fracaso constitucional, siendo que era la primera vez que estuvieron incluidos dentro de un diálogo político tras una marginación histórica, política, social y económica de siglos.

Que hayan sido sindicados como privilegiados, por ejemplo, o que se les estaban otorgando derechos exclusivos que el resto no tenía. Ese es un tema que tenemos que pensar, discutir y hacernos cargo.

– ¿Cómo la plurinacionalidad, o un concepto parecido, podría generar la suficiente transversalidad en el Comité de Expertos?   

Hay que distinguir dos cosas. La plurinacionalidad no es un estándar internacional. Al igual que la multiculturalidad o la interculturalidad, son proyectos políticos, son formas de cómo se concibe el Estado a sí mismo. En ese sentido, yo estoy más preocupada en este proceso del reconocimiento de los derechos más que en cómo el Estado se concibe.

Una vez que superemos la marginación política de los pueblos indígenas en la esfera pública, podemos ver cómo el Estado se reconoce. Pero en este momento me importa que la Constitución reconozca explícitamente la preexistencia de los pueblos indígenas como primeros habitantes de este territorio, y además reconozca sus derechos colectivos.

– ¿No hay un término que lo englobe?

Acá la importancia está en que aspiramos a estándares del derecho internacional. Habrá que discutir también si hacemos un reconocimiento de la interculturalidad o buscamos una palabra que dé cuenta de ello. Yo siempre me río, pero podríamos aspirar a una pluripueblidad ¿verdad? Pero es una palabra imposible de repetir.

Sin embargo, esa es la idea: Reconocer la existencia de pueblos indígenas, que conviven en el Estado chileno, son parte de la sociedad chilena, no amenaza la integridad territorial ni nacional, pero sí tienen diferencias y derechos colectivos diferenciados.

– Además de este tema ¿Qué otros nudos serán difíciles de desenredar para el Comité de Expertos?

A mí me parece que la descentralización es un tema fundamental y clave, implica el desarrollo y la modernización de este país. Cuánto y cómo lo hacemos es un tema complejo que hay que determinar, más allá que la consigna de todos digan que es importante desentralizar.

Por otra parte, en sistema político hay un consenso fundamental en que tenemos que modificarlo y que sea habilitante de que, quien gobierne, sea capaz de llevar adelante su programa de gobierno, independiente de quien sea. Cómo va a funcionar el sistema de partidos políticos, cómo se va a resguardar la relación entre Poder Ejecutivo y Legislativo, ahí vamos a tener un núcleo grande de discusiones.

Un tercer nudo relevante va a ser el Estado social y democrático de derechos, ya hemos visto que tenemos divergencias importantes que vamos a tener que discutir, dialogar y pactar.

También es importante decir que requerimos una Constitución que consagre la paridad, el enfoque de género en su conjunto, la autonomía de las personas de desarrollar su libre personalidad y sus derechos sexuales y reproductivos. Ahí también me imagino que vamos a tener una diferencia. Lo mismo los derechos de agua y otros temas medioambientales.

Para cerrar, igual me gustaría decir que si bien van a haber varios puntos de discusión, también hay cosas sobre las cuales hay consenso. Yo soy una persona que está muy abierta a ser persuadida con argumentos y con respeto, y espero que todos los que vamos a integrar el Comité de Expertos tengan esa altura de miras.

Déjanos tus comentarios
La sección de comentarios está abierta a la reflexión y el intercambio de opiniones las cuales no representan precisamente la línea editorial del diario ElDesconcierto.cl.