Sebastián Sichel y municipalidades: “Funciona transversalmente el Partido de los ladrones”

El excandidato presidencial Sebastián Sichel asegura que ahora come más que antes, pero que ha adelgazado a punta de subir cerros. Tras un largo periodo de abstinencia mediática, ha vuelto a estar en contacto visible con el periodismo y esta semana estuvo con Manos Libres para delinear lo que -a su juicio- debieran enfrentar y poner en práctica de aquí en adelante los llamados sectores moderados de la política chilena.

Con la vehemencia de siempre y de manera cruda, puso sobre la mesa los defectos y virtudes que persisten en el centro que representa, así como también criticó al gobierno de Gabriel Boric por lo que denominó “aprendizajes caros”.

Respecto a una posible nueva candidatura, el abogado fijó márgenes de factibilidad para ello.

El centro tibio es poco sexy

“Yo creo que los centros tibios son más fomes que bailar con la hermana y creo que nosotros hemos explicado de mala manera lo que es el centro. Yo soy radical y orgullosamente de centro. Pero eso ¿qué significa? Algo de centro es como un cuento geográfico en la política. Creo que no hemos sido capaces de generar, a partir de esto, una identidad. Y eso es súper importante en minutos en que la política es súper identitaria y ¿qué significa una identidad? Yo soy un liberal puro, pero ¿qué significa ser liberal y qué significa también serlo, en la idea de (John) Rawls? Significa perseguir la justicia como ambos vértices de una misma estrategia y creo que en eso hemos sido súper tibios. Entonces, al final, parecemos más inocuos que alguien que genera contenidos.

Quiero decir que el radicalismo del centro no existe en la política chilena, lo que existe, más bien, es tibieza de centro. Y eso hace que seamos no solo fomes, sino poco sexys, pero además que no tengamos identidad y cuando uno tiene identidad te diluyes.

Nosotros tuvimos un tremendo triunfo en la primaria, me hubiera encantado estar más tiempo de ministro, créeme que no salí por gusto, salí porque algunas maquinarias de los partidos no estaban muy felices de que a un minuto le fuera tan bien en su minuto”.

¿Cómo nos vamos a repartir?

“El éxito de la primaria fue muy bueno y generó un reentusiasmo en un gobierno que venía muy golpeado (el de Sebastián Piñera). Lo que pasa es que vino ahí una especie de borrachera, ganamos la primaria, pero sacamos 500.000 votos menos que los que estaban al ladito. Y al otro día me di cuenta, en mi comando, de que se están agarrando a coscachos como si hubiéramos ganado el gobierno y empezó una especie de autoengaño de que -en realidad-, ahora sí nos tocaba y eso era mentira.

Yo creo que se leyó mal el minuto político, ¡y eso vale para mí también, es una autocrítica! Hubo un exceso de entusiasmo, exceso de crisis y de egoísmo en mucho liderazgo en la derecha. Hubo también un exceso de coqueteo con el mundo de José Antonio Kast y, por lo tanto, terminó diluyendo lo que era una oportunidad, no un éxito.

Primero diluyéndose otra vez la derecha con la lucha fratricida interna, con las peleas chicas, en vez de preocuparnos de, efectivamente, presentar un proyecto de país distinto a Boric. Voy a decir algo que nunca he dicho, pero en una conversación privada entre los partidos de la elección (de la primaria), uno me decía ´Bueno, ya ganamos, ¿ahora, cómo nos vamos a repartir lo que viene?´, y yo le decía ´oye, pero si no hemos ganado nada, nos faltan 500 mil votos para empatar´”.

Responsabilidades del F. Amplio

“Respecto a lo pendular (de las últimas elecciones), más que péndulo, yo creo que aquí el Frente Amplio -al igual que Podemos en España, ya que hubo elecciones hace poco allá- jugó a la pelota, se llevó la pelota para la casa, hizo lo que quiso y, por lo tanto, lo que ha ocurrido, más bien, es parecer un movimiento de ultraizquierda que yo asocio al Frente Amplio con el Partido Comunista, que robó la pelota, la pinchó y destrozó el sistema.

Y eso hace que todo sea posible el día después con voto obligatorio, que Republicanos crezca, capaz que crezca el centro después. Cuando alguien que prometió tanto, termina llevándose la pelota, pinchándola y diciendo ´la pelota es mía´ -que es mi sensación de Jackson y de Boric, en general-, lo que está pasando hoy día es que la gente está buscando un nuevo dueño (de la pelota).

Lo que nos pasó a nosotros muy fuertemente, a la gente de centroderecha con gente de centroizquierda, es que quedamos destrozados y no hemos alcanzado a organizarnos de nuevo para decir ´oye, nosotros también podemos manejar la pelota´. Hasta ahora quedamos pulverizados después de la elección, pero creo que ha sido por la estúpida polarización que generó el Frente Amplio en Chile lo que ha generado esta idea de que cualquiera se puede llevar la pelota para la casa, este movimiento pendular”.

Gobernabilidad depende del centro

“Nosotros sacamos un millón 900 mil votos, lo mismo que sacó Parisi, y los medios se excitaron con él, como si fuera el nuevo presidente. Y miren lo que pasó con Parisi: hace poco salió una encuesta respecto a qué pasaría si la gente votara en primera vuelta nuevamente, y nosotros seguimos marcando los mismos 14 puntos que sacamos. O sea, evidentemente el centro en Chile no es mayoría, es un 14% del electorado que es lo que saqué yo.

Ese voto (el 14%) sigue existiendo. Si (la pregunta es) ¿va a gobernar solo el centro político en Chile? ¡No, esa respuesta es como de cabro chico!, pero he escuchado tanto a centristas leninistas que creen que el centro solo va a ser solo mayoría, ¡no! En Chile nadie gobierna solo. El Frente Amplio no puede solo y miren cómo les ha pedido agüita a los bacheletistas para poder construir gobernabilidad. Republicanos tampoco podría gobernar solo.

La pregunta es ¿quién es el eje? ¿quién va a administrar el juego? Yo prefiero, mucho más, que sea el centro en acuerdo con otro sector político, pero mi reflexión no es sin autocrítica, es que el centro solo no puede, y yo para ganar, necesitaba a la derecha, pero a la derecha le gustaba más José Antonio (Kast) ¡y se fue para allá a sabiendas que iba a perder la elección con Boric! La pregunta del centro político, pero también de otros sectores políticos hacia adelante, es ¿quién va a asegurar gobernabilidad? Y la respuesta a eso es que se va a requerir al centro como eje estratégico en el mediano plazo”.

Anhelo por el 30%

“Nuestro error, el mío, no le he hecho la culpa a nadie, es que el centro no es una cosa light, buena onda, un punto geográfico ´mira, no se peleen chiquillos´; eso es fome para el fútbol, es fome para el amor, etc. Yo creo que hay algo más de contenido que tiene que verterse sobre la mesa que no se ha vertido, que es algo que teníamos, pero en vez de eso, nos preocupamos más de decir ´oigan, no se peleen, no se hayan a los extremos´.

Mi campaña ahí fue muy fallida. Más decía que no había que polarizar el país que por qué había que votar por nosotros. Eso es un error culposo mío como un líder, pero también culposo de un sector político que no ha tenido el coraje para decir ´somos distintos a otros´.

Yo en Amarillos vi mucho eso, vi en Demócratas mucho eso como ´es cruzar ríos, romper fronteras, quebrar huevos´, creo que eso es lo que debería ser el centro en Chile en el futuro, pero va a demorar en articularse. Si José Antonio Kast sacó el 7% de la elección anterior y nosotros sacamos el doble, y estamos hablando de él hoy día años después! Esto puede ser una especie de semilla que se sembró y ¡capaz que en dos años más seamos el 30%!

Estamos partiendo de un piso más alto que muchos que partieron sin nada y, por tanto, hay que ser mucho más entusiasta. Yo sí creo que ahí hay mucha desazón después que se pulverizó (el centro), como dicen algunos. ¡Pero, cuidado, nadie se pulveriza con un millón de voto en Chile, eso sería como ser suicida en términos políticos!”

Entre la UDI y Demócratas

” No le tengo miedo a que haya una gran Federación que vaya desde la UDI hasta Demócratas y que sea una alternativa a Republicanos y al Frente Amplio. Yo creo que hacia allá me gustaría avanzar, trabajar y estar ¿Dónde estaría yo? Probablemente entre Amarillos y RN, no tengo claro el dónde, porque cuando uno ha militado antes es igual que separarse, llevo dos separaciones y para casarme de nuevo me tengo que enamorar muy fuertemente (ríe). Pero en términos personales creo que ese es mi espacio geográfico natural.

Ciertamente, creo que lo más relevante que hay en Chile es que ahí se encuentra -entre ese 14% del voto centrista puro, que es lo que sacamos nosotros más otros votos-, está más del 35% de los chilenos y, por lo tanto, el centro puede ser mayoría, pero tienen que ponerse de acuerdo.

El problema que me pasó a mí fuertemente con algunos sectores de la UDI, es que querían ¡estar con Kast, bailar con Kast, salir a pololear con Kast, bueno entonces que se vayan con Kast! Pero la UDI tiene que definir dónde está su mundo, si va a ser un partido de centroderecha moderno o si va a ser un partido conservador de derecha, que es lo de José Antonio Kast, y no lo digo peyorativamente, son definiciones que tienen que tomar ellos. A mí me tocó ver en la campaña, estar en el centro de ese debate ¡justo en esa separación!, en que no se ponían de acuerdo…donde querían estar. A unos les parecía bien este cabro de centro y decían ´queremos crecer hacia el centro´, mientras otros gritaban ¡´nooo, viva Pinochet y viva el conservadurismo!´ e insisto, no lo digo negativamente”.

La política AliExpress

“Nosotros tenemos que tener súper claro que en Chile hay una centroderecha y una centroizquierda que pueden construir puentes juntos y que pueden conciliar dos principios básicos, esto también es intelectual. Es cierto que el país requiere defender su libertad frente a la amenaza del mundo comunista y este autoritarismo de izquierda, ¡pero también es cierto que somos un país más injusto que la cresta! (dice enfático), que la gente no llega a fin de mes y no hemos tenido Estado fuerte capaz de resolver esos problemas.

Los que crean que mañana, si llega J. Antonio Kast o cualquiera (a La Moneda) y pone un tanque se acaban la inseguridad y los problemas en Chile, ¡es porque no entienden nada! Dense una vuelta por los barrios de Santiago y se van a dar cuenta que la gente hace cola en el Estado. Yo creo que ambos discursos, de la extrema izquierda y de la extrema de derecha son carentes de contenido porque no se han definido por alteridad. Jackson hizo un asado durante años contra los 30 años y contra la colusión de la política con el empresariado y miren cómo le fue.

Ahora, también siento muy fuertemente que el mundo republicano -más bien algunos extremos republicanos-, están haciendo carne contra el Estado, haciéndose un asado y diciendo que el Estado no sirve para nada, pero un día les va a tocar gobernar y van a tener que hacer que él Registro Civil atienda y saque las filas, van a tener que tener un Fonasa que funcione, y va a tener que contratar funcionarios.

Yo creo que eso es una mentira, que cuando se llega al gobierno se desnuda tan rápido…que tenemos la oportunidad nosotros de vestir la verdad de lo que necesita de Chile, que requiere ¡mejor Estado y mejor mercado y no lo uno o otro que es una mala oferta no más y que dura lo que dura! Es como el ofertón hasta que te llega el producto de la casa. Yo diría que esa es la política Aliexpress, que te funciona súper bien hasta que compras el producto y te llega a la casa, chiquitito…entonces tienes gobiernos que no funcionan al final del día”.

Chile no tiene mercado

“Yo quiero defender la libertad en serio. Que me pueda levantar en la mañana y hacer lo que quiera, pero que me pueda acostar en la noche con quien quiera y que nadie se meta en ese lugar y que pueda circular libremente por mi país. Ni terroristas ni militares definiendo cuál es mi vida. Lo otro, es mejor Estado y mejor mercado, no es lo uno o lo otro, todo el mercado que sea posible y eso significa una guerra desatada contra la concentración de la riqueza de los grupos económicos en Chile, la derecha tiene terror cada vez que yo lo digo, una vez dije esto y La Segunda tituló ¨Sichel y Boric se unen contra la concentración de la riqueza ´¡Ojalá, pues!

Yo creo tanto en el mercado, soy tan radicalmente pro-mercado, que creo que ¡Chile no tiene mercado y digo abiertamente en que industria (no existe el mercado)! Hay que combatir la concentración del sistema financiero en los bancos, no puede ser que en Chile no tengan objeto único y estén metidos en industrias complementarias matando a la gente con eso.

Hay concentración en la industria del gas, para qué decirlo, pero…si se dan cuenta el retail como ha ido concentrando los pagos…en la salud con la concentración vertical de las Isapres. Entonces al final debemos tener un proyecto de centro que ama el mercado y odia la concentración. Eso es lo que detiene el abuso, no lo va a tener el que el Estado haga gases fucsia, lo va a detener que alguien diga que el mercado no puede tener más del 30% de participación en ninguna de las empresas, Israel lo hizo. Mientras nosotros defendamos el mercado desde la lucha contra la concentración, tenemos una oportunidad que la gente entienda que estamos de su lado”.

Nota al gobierno

“Si fuera un alumno no me llega ni al tres. Porque al gobierno no se va a aprender, pues sí es caro para los chilenos que paguen el lío de sus impuestos que uno vaya a formar, hay autoridades, porque las autoridades deberían venir formadita viene a tomar decisiones. Tienen cuatro años para implementar programas de gobierno, no ocho entonces. Me duele mucho un gobierno que todo el día dice que está aprendiendo, el ministro Jackson dijo ´fue un aprendizaje saber que los retiros de los fondos de pensiones podían provocar inflación!´, ¡no me hable tonterías, pues!, eso lo sabía yo en segundo del liceo con mi profesor de Economía, ¡si él fue a aprender al Estado caro salió para los chilenos!

Es un gobierno que se está dando un gustito de haber prometido cosas que no sabían empíricamente si i ban a funcionar y, por lo tanto, lo está haciendo pésimo. El costo de este aprendizaje hace que la gente pierda pega, se quede sin sueldo a fin de mes, las Pymes quiebren, etc. También es un gobierno ególatra, demasiado ególatra. Me había tocado ver presidentes narcisos, pero este es un lote de cabros bien ególatras, que al final están más autosatisfechos con lo que ellos dicen -y que creen que hay una conspiración de otra izquierda, del diario La Tercera y del mundo-, para decir que no quieren ver lo lindos que son. Además, se han    gustito muy personal, cuando eran oposición estaban en contra de los Estados de Excepción, en contra de la Ley Anti-barricadas, en contra la Ley de control de armas, en contra el IFE, en contra de muchas cosas.

Cuando fui ministro de Desarrollo Social no hubo ningún proyecto en que estuvieran a favor. ¡Ni uno, ni uno! Yo saqué el IFE con los votos de (Ricardo) Lagos Weber y otra gente responsable porque ellos votaron en contra, ¡contra el IFE, poh! Entonces, tú dices ´mira los gustitos que se dieron a costa de los chilenos para después llegar al gobierno y decir ¨nooo, si el Estado de Excepción es bueno, los retiros son malos, rechacémoslo´. Por lo tanto, también jugaron con las expectativas de la gente y eso se paga muy caro en política. Yo sé por qué perdí también la elección muy fuertemente, me opuse los retiros y eso era doloroso y con la cagada que me quedó -y lo digo honestamente-, al decir ´sabes qué, yo no voy a dejar que me manipule la gente de izquierda respecto de cómo se vota esto´, porque había que votarlo y yo, sabiendo que la gente necesitaba los retiros, ¡si mis amigos son del liceo y me lo decían! Pero ese es el costo que había que pagar para ser responsable.

En un país serio con mayúscula nos hubiéramos puesto de acuerdo los candidatos para decir ´esto no es transable´ y, mientras tanto, el señor Boric se dio vuelta a la chaqueta en la mitad, jugando con la expectativa de los chilenos para después llegar al gobierno y decir ´no, es que era broma, ahora aprendimos, entonces lo que le dije que íbamos a hacer no lo vamos a hacer´ y eso es muy duro. Vale decir, el vacío que generaron de credibilidad en la política es un hoyo que va a costar mucho taparlo en muchos años más”.

¿Candidato nuevamente?

“Tengo pocas ganas de ser candidato, eso lo veré después. No quiero hacer como -lo que ocurre siempre- que después a alguien le vengan ganas de buscar esta entrevista y me diga ´pero si usted dijo que no, y ahora sí es candidato´(ríe). Pero esa es la idea, digamos, que tengo hoy día, enfocarme en mi proyecto personal, salvo que exista otra cosa más adelante. Si llegara a existir en el futuro esta federación de la que antes estábamos hablando, si se conforma ese conglomerado con gente de centro derecha y de centro izquierda y, si el centro se transforma en el eje de eso y yo puedo encabezarlo, feliz. Pero veo que, al menos en este minuto, está difícil ese camino para llegar hasta ahí. Por lo tanto, hoy alto prefiero ser constructor más que obrero. Creo que esto es un camino más largo plazo que no daba para estos cuatro años”.

El partido de los ladrones

“Los corruptos no tienen signo político, son ladrones. Ese es un partido transversal y en las municipalidades se ha instalado muy fuerte el Partido de los Ladrones. Lo digo porque mucha gente como que se queda pegada, a mí me pasa siempre que me dicen ´oye, en tu campaña aportó un señor que era ejecutivo de no sé qué ‘y yo decía ´oye, aportó transparentemente por los medios legales voluntariamente. En eso consiste la transparencia en el sistema político´. Pero, mientras tanto, hay un espacio oscuro que los partidos cuidan hay nadie anuncia nada, no hay transparencia y está eso que se llama el Partido de los Ladrones y muchos de ellos están instalados en municipios. ¡Y además instalan clanes completos!, es una cosa increíble. Yo nunca he trabajado en una municipalidad y no pretendo hacerlo, pero me toca ver en juicios.

Yo ejerzo como abogado, tengo una oficina y litigo, y como soy experto en Derecho Público, Constitucional y Administrativo, litigo harto con municipios. Y ahí me doy cuenta además de que uno pregunta ´oiga, ¿y usted quién es? ´y es primo del alcalde o sobrino del Administrador Municipal. O sea, todos los funcionarios con algún parentesco. Entonces, tú dices ´este es un lugar sin pérdida. Y, además, cuidado que las corporaciones son lugares que son tierra de nadie, porque son de derecho privado, por lo tanto, pronto no se regulan por el derecho público. Pero, como son de derecho privado sin fines de lucro, tampoco el Servicio de Impuestos Internos les puede entrar.

Lo que hizo Torrealba y lo que están haciendo muchos otros municipios, pasa en cada una de las municipalidades. Ojalá alguien tenga el coraje de pararse y decir ´voy a hacer una auditoría a todas las corporaciones municipales de Chile de una vez´, con un servicio creado por el Estado para ello…no sabemos lo que vamos a encontrar, ¡porque ahí sí que va a haber muertos escondidos debajo de los mesones! Con las tragedias que están pasando en Chile, así como aparece un muerto en la Alameda, nos vamos a encontrar ahí muertos, en serio, de gente que le está robando a los más pobres”.