Matthei se suma a la estrategia de Trump y Bolsonaro de hablar de fraude previo a elecciones

Este martes la alcaldesa de Providencia, Evelyn Matthei, habló de posibilidad de fraude si es que las próximas elecciones municipales -donde además se elegirá a concejales, gobernadores y concejeros regionales- se realizan en dos días.

“No me gusta para nada, por la posibilidad de fraude”, señaló la autoridad comunal y agregó que “la posibilidad de fraude es enorme”.

“Me carga el tema de una elección en dos días. De verdad, muy malo” y “¿Por qué no ponen más establecimiento? Todos vamos a estar de acuerdo en eso”, complementó.

«Dos días de elecciones, la verdad es que el fraude es casi imposible de controlar», reiteró la autoridad comunal.

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La alcaldesa, quien según las encuestas es por el momento la favorita para ganar las próximas elecciones presidenciales, no explicó ni entregó argumentos que sustenten sus dichos sobre un posible fraude, por lo que fue cuestionada por el subsecretario del Interior, Manuel Monsalve.

“Es muy grave colocar en cuestión la transparencia del sistema electoral chileno, desde el retorno a la democracia no hay ningún antecedente que le permita dar sustento a las preocupaciones de la alcaldesa Matthei”, señaló Monsalve.

La autoridad de gobierno agregó que “el sistema electoral chileno es un sistema ejemplar que da confianza, que es transparente, que es rápido, que es oportuno y que ya tiene experiencia en materia de procesos electorales que se han llevado en 2 días y no ha habido cuestión en materia de transparencia”.

Cabe recordar que en diciembre de 2020, en medio de la pandemia y con candidaturas para alcaldes, gobernadores, concejales y convencionales constituyentes, Matthei propuso hacer la elección de 2021 en dos días. En esa ocasión no advirtió ningún peligro de fraude.

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Instalar la duda en las instituciones

Hablar de fraude para poner en duda la institucionalidad no es algo nuevo. Ya lo hizo hace un par de años el expresidente de Estados Unidos, Donad Trump, quien ocupó esa estrategia frente a Joe Biden, para luego ser imitado por el exmandatario brasileño Jair Bolsonaro y posteriormente por la excandidata Keiko Fujimori en Perú, cuando vio que su contendor Pedro Castillo iba ganando en el conteo de votos en julio de 2021.

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El hablar de fraude sin entregar pruebas también se vivió en las elecciones presidenciales en Argentina.

«Hubo irregularidades de semejante tamaño que ponen en duda el resultado», señaló el por entonces diputado de La Libertad Avanza y actual mandatario trasandino, Javier Milei, luego que pasara a segunda vuelta junto a Sergio Massa.

De un tiempo a esta parte la desinformación en medios de comunicación y principalmente en redes sociales ha sido un asunto de preocupación, a tal punto que en Chile hay un proyecto de ley que regula y sanciona la difusión de noticias falsas, mientras que en septiembre del año pasado la Unión Europea advirtió a Elon Musk que X (ex Twitter) “es la mayor fuente de noticias falsas”.

Hechos vs opiniones

Respecto al hecho de hablar de fraude, incluso antes de que se realicen las elecciones, es lo que se conoce como “disonancia cognitiva”, es decir, colocar el prejuicio antes que lo fáctico o el hecho verificable que sustente la afirmación.

Es lo que hace más de un lustro el lingüista y filósofo estadounidense, Noam Chomsky, decía respecto a que “la gente ya no cree en los hechos”, como una manera de explicar que los ciudadanos han perdido la confianza en las instituciones y en la clase política, debido precisamente a la debilidad de estas mismas.

En julio de 2023, Ivan Paganotti, doctor en Ciencias de la Comunicación y profesor de la Universidad Metodista de Sao Paulo, hablaba de las consecuencias y amenazas para la democracia el acusar de fraude en elecciones.

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“La percepción de que las acusaciones sobre fraude electoral o intentos de amenaza a la democracia, incluso de representantes políticos de altísima visibilidad, también pueden tener consecuencias», señalaba a la agencia AFP, luego que el Tribunal Supremo Electoral de Brasil condenara a Bolsonaro por difundir acusaciones falsas como, por ejemplo, atacar sin pruebas la fiabilidad del voto electrónico.

En relación a los dichos de la alcaldesa de Providencia, el subsecretario Monsalve concluyó que “dejemos que el Servicio Electoral haga su trabajo porque hasta ahora el trabajo le ha dado confianza y transparencia a los procesos electorales”.