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El trabajo audiovisual reflexiona sobre cómo construir una nueva economía post capitalismo, proponiendo como acciones necesarias terminar con el PIB como medida de progreso económico, cambiar la forma en que se produce y circula el dinero, transitar a semanas más cortas de trabajo, limitar y regular la publicidad y obsolescencia programada de productos, así como reconocer la deuda ecológica de los países ricos e industrializados.
En las dos últimas décadas se han producido los 18 años más cálidos registrados desde 1850. Los océanos se están volviendo más ácidos amenazando la base de las cadenas alimentarias que sostienen la vida. Las olas de calor extremas, los incendios forestales y las inundaciones son solo algunas de las señales de la emergencia ambiental y climática provocada por una sociedad globalizada que defiende el progreso como crecimiento económico, y lo persigue a cualquier costo.
Ante este escenario, el documental “Fairytales of Growth” (Cuento de Hadas del Crecimiento) reflexiona respecto a qué tipo de progreso implica crear un mundo qué está a punto de destruirse a sí mismo y cómo podemos transitar a una sociedad sustentable, ecológica y equitativa.
Para ello, el documental entrevista a expertos y académicos en sustentabilidad y economía ecológica respecto a las consecuencias que ha tenido en nuestro planeta el dogma del crecimiento económico, ilimitado, basado en la extracción de recursos naturales, así como los problemas y limitaciones del denominado “crecimiento verde” y su hipótesis de que la economía puede seguir creciendo sin dañar el medio ambiente y desacoplarse del consumo energético.
Tras ello, el film explora los planteamientos del decrecimiento como un nuevo modelo de sociedad, planteando la hipótesis de que, para evitar una catástrofe climática y social, los países industrializados y ricos deben reducir su producción y consumo, teniendo como objetivo el bienestar, la sostenibilidad ecológica y la equidad social.
Para ello, el trabajo audiovusual reflexiona sobre algunas de las medidas planteadas por los expertos y académicos, quienes proponen terminar con el PIB como medida de progreso económico, cambiar la forma en que se produce y circula el dinero, transitar semanas más cortas de trabajo, establecer una renta básica universal a nivel global, limitar y regular la publicidad y la obsolescencia programada de los productos y reconocer la deuda ecológica de los países ricos e industrializados, lo que implicaría una importante redistribución de los recursos mundiales desde los países más ricos del norte a los países del hemisferio sur.
