Pueblos atacameños golpean la mesa una vez más para ser considerados Estrategia del Litio

“Los que ya vienen dialogando están tomando decisiones empresariales sobre nuestras tierras, sin atender a quienes las habitamos, sobrevivimos con la agricultura y los esfuerzos en turismo, otros aún sin espacio físico territorial. Hay comunidades sin alcantarillado, agua potable o establecimientos educacionales”, declaró este jueves el presidente del Consejo de Pueblos Atacameños (CPA), Vladimir Reyes.

El encuentro fue parte de una convocatoria y punto de prensa organizado por el Consejo a raíz de la Estrategia Nacional del Litio presentada por el Gobierno hace dos semanas.

El dirigente reclama que, aunque en la presentación el Presidente Gabriel Boric declaró que el siguiente paso iba a ser un encuentro con su organización, esto aún no sucede.

Ya son varias las organizaciones de la sociedad civil que han manifestado su descontento, como algunas comunidades científicas, otras comunitarias e incluso autoridades regionales, por lo que consideran falta de participación ciudadana en la elaboración de la estrategia.

Mismo proceso que ya registra más de 100 reuniones por lobby de mineras nacionales y extranjeras.

Impacto en salares

En su declaración, el dirigente levantó la preocupación de su pueblo por el estado actual del salar de Atacama y el impacto que ha tenido la extracción de salmuera.

Sostuvo que tanto los estudios hechos por CPA como los de Corfo dan cuenta de las consecuencias de la actividad minera en el lugar.

“¿Podría enviarnos un informe detallado sobre el estado actual del Salar de Atacama?, queremos que usted informe al país cómo está la vida del Salar, que no es litio, que no es salmuera, sino que es parte de nuestra cosmovisión”, agregó.

11 mil años

Reyes recordó el uso ancestral que hace el pueblo atacameño lickanantay en el salar de Atacama hace más de 11 mil años y planteó que el Estado se haga cargo de las demandas territoriales que han sido levantadas constantemente por comunidades del sector.

Además, criticó el historial de Codelco en el territorio, y los conflictos que ha generado con comunidades de la zona por el uso de agua y por la contaminación.

“Lamentamos profundamente que el actor principal de las negociaciones sea Codelco, una empresa estatal que ha demostrado un comportamiento irrespetuoso con las comunidades”, señaló.