¿El olor contamina? Ley en el Congreso busca regular este tipo de impacto ambiental

En los últimos años se ha consagrado la contaminación acústica como un tipo de afectación al medio ambiente, al punto de que hoy en día casi la mitad de las denuncias que recibe la Superintendencia de Medio Ambiente (SMA), son por ruidos molestos.

Sin embargo, los olores molestos parecen no tener aún la misma consideración. Un proyecto de ley, presentando en el 2015 en el Congreso pero aún en trámite, busca modificar la Ley de Bases Generales del Medio Ambiente para reconocer el olor como un agente contaminante.

Existen menciones a la contaminación por olores en normativas específicas, pero no en esta ley, lo que implica que cualquier persona o empresa que quiera desarrollar un proyecto en el país “no está legalmente obligada a considerar los olores como un elemento que pueda causar contaminación y alterar las condiciones de vida normales”, explica el ingeniero y ex constituyente Francisco Caamaño.

Caamaño se suma a las voces que han llamado a retomar la discusión legislativa de este proyecto, que busca reducir los impactos que generan los olores de actividades industriales como mataderos, plantas de tratamiento de aguas servidas, y otras que generan desechos sólidos o líquidos.

Lo que hay y lo que falta

En febrero del 2023 se sentó un precedente para regular este tipo de contaminación: el Ministerio de Medio Ambiente publicó la primera norma ambiental de olores del país, dirigida al sector porcino y dirigida a proteger la salud y calidad de vida de la población que vive cerca de planteles porcinos.

La próxima norma de olores, que está en elaboración actualmente, será la que regula al sector pesquero. Estas regulaciones establecen prácticas obligatorias de gestión de olores e incentivan la inversión en tecnología para elevar los estándares ambientales de estas industrias.

Sin embargo, el proyecto de ley en trámite apunta a que todos los proyectos que puedan causar un impacto ambiental por el olor, deban someterse a una evaluación ambiental, que exige estimar el impacto y buscar medidas para reducirlo y mitigarlo.

El proyecto ingresó a la Comisión de Medio Ambiente del Senado en el 2019 y recientemente se retomó el debate dentro de ésta, donde autoridades y representantes de organizaciones han expuesto sobre la norma. Entre ellos, el ministro y presidente del Segundo Tribunal Ambiental, Cristián Delpiano, afirmó que la falta de una norma general de olores dificulta la fiscalización.