Alto Maipo en problemas: Detectan cuarto desprendimiento que podría retrasar más la operación

Desde que la mega hidroeléctrica Alto Maipo era solo un proyecto, las comunidades que luchaban en su contra no solo alegaban por los impactos que tendría la intervención en los glaciares de Santiago, sino que también ponían en duda la viabilidad técnica del proyecto como tal, por la falta de agua y la deficiente evaluación.

Tal hipótesis parecería confirmarse cada vez más, ya que desde fines de 2022 se encuentran cerradas dos de las centrales del proyecto debido a accidentes y desprendimientos en los túneles de aducción.

Ya en septiembre, desde la empresa se informó que esta suspensión de operaciones continuaría al menos hasta octubre del 2024.

Ahora, la empresa titular, Aes Andes, detectó un cuarto desprendimiento que todavía no logra evaluar debido a la falta de seguridad para ingresar al sitio, y que podría extender aún más el retorno de la operación. Así lo informó la empresa al Coordinador Eléctrico en una carta del 21 de diciembre a la que tuvo acceso el Diario Financiero.

Un proyecto criticado

No solo son organizaciones ambientales las que han alzado la voz contra el proyecto: el año pasado, al conocerse los problemas de funcionamiento de Alto Maipo, el gobernador de la Región Metropolitano, Claudio Orrego declaró que estaba “feliz” de que el proyecto “esté estancado”.

“Yo esperaría que no se ocupara nunca Alto Maipo y que siguiéramos aumentando el uso de otras fuentes energéticas como la solar que es mucho menos contaminante y riesgosa para Santiago”, declaró en su momento el gobernador.

En palabras de Orrego, el proyecto no representa ningún aporte a la región, sino más bien una amenaza ante la situación de crisis hídrica.

“El futuro de Santiago está en el Cajón del Maipo, en la cuenca del río Maipo que es una de las más afectadas por el cambio climático y no se merece tanta intervención, tanta minería y tantas actividades industriales” sostuvo.

Otros incumplimentos

Los problemas de operación no son el único flanco que enfrenta la empresa, que en enero de 2023 recibió cuatro cargos graves por parte de la Superintendencia de Medio Ambiente (SMA), por incumplir sus compromisos ambientales, con los cuales arriesga una multa de hasta $ 15 mil millones.

Uno de los compromisos incumplidos era el de construir una bocatoma complementaria para el canal El Manzano, que era parte de un convenio con la comunidad usuaria de aguas del sector.

La empresa también incumplió los compromisos de reforestación con vegetación nativa, de rescate y relocalización de fauna nativa, y de no acceder ni ejecutar faenas en zonas de protección paleontológica.